Don Ramón Reguero, pregonero de Tapia

Hoy quiero acordarme de una persona muy entrañable para mí, que sin haber nacido en Tapia de Casariego, buscando sus raíces, llegó a Tapia por primera vez en los años ochenta (en aquellas fechas en compañía de su esposa, tristemente fallecida). Desde entonces no deja de venir por aquí todos los años y en repetidas ocasiones, sintiéndose un tapiego más y encontrándose aquí como cualquier otro vecino. Es un placer poder saludarlo y acompañarlo cada vez que nos visita, pues es una persona que se hace querer, discreta, culta, que se interesa por todo lo que ocurre en el mundo pero que sobremanera no pierde ojo sobre lo que acaece por estas latitudes. Se trata del canario don Ramón Reguero, nieto de Don Ángel Reguero Guisasola, que fuera Presidente de la Audiencia Territorial de Burgos y Magistrado de la de Cádiz y Las Palmas, que había sido educado en el excelente Instituto de Tapia, tercer centro educativo en Asturias de este nivel, del que en la actualidad estamos celebrando el 150 aniversario de su existencia, pues fue el 9 de julio de 1865 cuando su pariente del mismo nombre (Ramón Reguero) síndico del Ayuntamiento de Tapia asistió al acto de colocación de la primera piedra del centro y pronunció entre otras las siguientes palabras: Esta no es una piedra material, es otra cosa muy distinta; es, señores, la luz contra las tinieblas, la ciencia contra la ignorancia.

Aquí en Tapia, a los originarios de la villa, a nadie le resulta extraño cuando se habla de la huerta de Reguero, hoy atravesada por una de las calles más importantes de la localidad y donde se encuentra además del colegio infantil, una pista deportiva y el edificio civil más antiguo de la villa (conocido como la casa de Reguero), en el que hasta hace poco se ubicaba la Casa de Cultura, que albergaba la biblioteca municipal, una sala de exposiciones, una guardería infantil y otros espacios. Recientemente el Ayuntamiento de Tapia de Casariego, en reconocimiento a su abuelo, en la nueva Casa de Cultura de la localidad, colocó una placa dándole nombre de Travesía del Magistrado Ángel Reguero a una calle de la villa.

Don Ramón Reguero, ahora ya jubilado, habiendo estudiado en la escuela de Comercio y de haber ejercido muy dignamente su profesión como funcionario técnico administrativo, lo hacía compatible y de forma altruista con labores informativas y de fotógrafo para diferentes publicaciones, sobretodo en el ámbito deportivo, en su tierra natal Las Islas Canarias-. Me consta que aún le pica el gusanillo y sigue haciendo sus pinitos como cronista, siempre acompañado de su inseparable cámara fotográfica. Es además un amante del futbol y gran seguidor aparte de los equipos canarios, de su Real Tapia y del Real Oviedo, del cual aún recuerda las alineaciones en la época gloriosa donde figuraban jugadores como Antón, Casuco, Gallart, Lángara, Herrerita, Emilín y compañía.

Hace unas semanas recibí una llamada telefónica suya, lo cual es bastante frecuente. Lo primero que siempre me pregunta es por las gentes del pueblo, de muchos incluso por sus nombres, ¿que tal tiempo hace?, ¿hay alguna novedad?, etc. etc. y siempre me dice a ver cuando puede volver por esa bendita tierra, que será lo antes posible. Pues bien, esta última vez, me comentó que le habían propuesto pronunciar el pregón de las fiestas del Carmen en Tapia de Casariego. Yo, para echarle un cable, de forma sincera pero ilusa, me ofrecí inmediatamente a facilitarle cualquier información que le pudiera interesar, que estuviese a mi alcance y le pudiera ser de utilidad. Pero pronto reaccioné y me dí cuenta de que él posee una extensa documentación y bibliografía de Tapia y le dije, que me parecía muy bien y que creía que era una persona muy indicada para afrontar tal envite y reunía méritos más que sobrados para ello. Ampliamente había demostrado su sensibilidad, afinidad, querencia y dedicación por esta bendita tierra, haciendo siempre gala de lo tapiego y divulgándolo por la multitud de lugares que recorre, como viajero incansable que es; y como en una pequeña dedicatoria que le había incluido en un detalle que le había hecho como muestra de agradecimiento por la infinidad de atenciones que tenía, le dije que era un fiel canario-tapiego y además se merece el nombramiento de hijo adoptivo de esta villa.

Sólo me resta decir, que espero poder estar presente en dicho acto que se celebrará el próximo día 5 de julio al mediodía en el auditorio local situado en la Casa de Cultura, al cual vendrá acompañado de toda su familia canaria. Espero y deseo la asistencia de mucha gente, pues se me antoja un acto tremendamente interesante y vendrá muy documentado, de eso no me cabe la menor duda. No dejará a nadie indiferente y sí a todo el auditorio plenamente satisfecho, con una visión tan cercana desde su lejanía geográfica. Reciba un fuerte abrazo de este humilde tapiego que bien le aprecia.