Refrescando la memoria
No es mi intención desvirtuar las palabras de un muy buen director y mejor persona, Ignacio López Aranguren, soy un asiduo lector de la prensa asturiana y sobre todo aquello que de una buena parte fue mi vida laboral, en la siderurgia asturiana, hoy Arcelor-Mittal.
Los trabajadores siderúrgicos asturianos siempre han tenido una importancia y la siguen teniendo en todo el proceso que desde hace muchos años está llevando la siderurgia asturiana, y en eso tienen que ver muy mucho los sindicatos, en la empresa siderúrgica, el reconocimiento del que habla Ignacio López Aranguren está fundamentado en los responsables sindicales de las federaciones estatales, como en los secretarios de las secciones sindicales de las fábricas, los cimientos se fueron construyendo en Madrid a base de muchas reuniones con todas esas personas y alguna más que no recuerdas, pero que fueron fundamentales para llevar adelante el plan industrial y dar una salida a los trabajadores, porque la representación que tenía en aquellos momentos era importantísima para poder sacar adelante la firma, y me estoy refiriendo a la Unión Sindical Obrera (USO). Esta reunión fue en el Ministerio de Industria, a las 12 de la noche, lo que estoy diciendo lo saben bien algunas personas, como yo, responsable en aquellos años del sindicato en Ensidesa, el presidente José Manuel García Hermoso, y el director de recursos humanos, Manuel Martín Martín. También tengo que decir que había personas que trabajaron mucho y duro por la siderurgia como Ángel Préstamo, Carlos Avello, con Óscar Fleitas, una noche en Gijón, tratando de convencerme de que el plan industrial era la única salida que había, y muchos más que vinieron después. Fueron tiempos en que la USO, como sigue ahora, tiene un peso muy grande y es quien inclina la balanza, para sacar adelante cualquier problema que surja.
La USO en Uninsa, Ensidesa, CSI, Aceralia y Arcelor-Mittal siempre ha estado por la defensa de los trabajadores y por la empresa, si no existe ésta no hay trabajadores y si no hay trabajadores tampoco hay empresa; no queremos pasar por alto que nadie, por muy alto cargo que haya tenido, nos deje fuera de todas estas últimas reestructuraciones dentro de nuestra siderurgia. Otros viven de lo que firman dos y sólo critican y ponen la mano para recoger los frutos.
Espero, amigo Ignacio, que haya sido un lapsus, no es mi intención molestar, sino recordar algo tan importante que este sindicato USO, conjuntamente con la UGT, hizo por la siderurgia española y, por ende, la asturiana.
Ángel Suárez Iglesias
Madrid
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