La Nueva España » Cartas de los lectores » Perlas y pellizcos

Perlas y pellizcos

2 de Septiembre del 2015 - Ramón Alonso Nieda (Arriondas)

Soy adicto a las "Mezclillas" de Carmen Gómez Ojea en LA NUEVA ESPAÑA. En las frondas de su prosa, ya de por sí deleitosas, siempre se esconde alguna perla. Perlas que se acompañan las más de las veces de algún pellizco de monja tucumana a la derechona. Ya se sabe, la derecha es la tonta de la clase con la que los graciosos divierten a la peña. El cachondeo con la derecha es un peaje, una especie de IVA o IBI cultural que la intelectualidad progresista (valga la redundancia) paga en especie. En la "Mezclilla" del 20 de agosto, el pullazo tucumano viene al final, como remate de faena. Ironiza Carmen con los ogros rojos, negros y muy malos y populistas que tanto teme hogaño el partido de los populares.

En los años treinta, el desprestigio del parlamentarismo tocaba fondo; entonces, como hoy, nadie daba un duro por el bipartidismo. La crisis era más devastadora que la que nos azota y desmontaba hasta las cuadernas un Estado del bienestar apenas esbozado. En ese contexto, salieron los ogros del bosque (los pardos; los rojos se habían adelantado). Salieron, curiosamente, del bosque progresista: Hitler fue dirigente del Partido Alemán de los Trabajadores; Mussolini militó en el ala radical del Partido Socialista Italiano, en cuya ejecutiva llegó a ocupar el tercer puesto; dirigió Avanti!, órgano oficial del partido. Los ogros, los rojos y los pardos, fueron cortejados por la "intelligentsia", siempre en celo. Heidegger y Sartre quedan como emblemas ominosos de ese idilio recurrente de la bella con la bestia.

El precipitado que aglutina Podemos presenta todos los ingredientes del totalitarismo; incluido uno de los más siniestros, el antisemitismo: si a alguien no le suena Matisyahu tal vez sea porque no lo dejan cantar. Si fuera periodista, no me haría pizca de gracia oír al líder máximo declarar que la libertad de expresión es incompatible con la propiedad privada de los medios. Como simple lector, ya me produce arcadas. Esa mezcla de fanfarria y de marxismo de catón, ese totalitarismo de opereta, más que miedo, me da asco. Y el flirteo recurrente de la bella con la bestia, los coqueteos y arrumacos de una "intelligentsia" desmemoriada y vanidosa (los que se dedican a la cultura, Carmen y Caso por aquí; la Komintern de Almodóvar por allá) me producen grima.

Ramón Alonso Nieda, profesor de Filosofía

Arriondas

Cartas

Número de cartas: 46126

Número de cartas en Octubre: 64

Tribunas

Número de tribunas: 2088

Número de tribunas en Octubre: 2

Condiciones
Enviar carta por internet

Debe rellenar todos los datos obligatorios solicitados en el formulario. Las cartas deberán tener una extensión equivalente a un folio a doble espacio y podrán ser publicadas tanto en la edición impresa como en la digital.

» Formulario de envío.

Enviar carta por correo convencional

Las cartas a esta sección deberán remitirse mecanografiadas, con una extensión aconsejada de un folio a doble espacio y acompañadas de nombre y apellidos, dirección, fotocopia del DNI y número de teléfono de la persona o personas que la firman a la siguiente dirección:

Calvo Sotelo, 7, 33007 Oviedo
Buscador