¿Invasión de atmosferianos?
Subtítulo: El desarrollo de la contaminación
Destacado: La creación de la cátedra climática Princesa de Asturias pudiera ser un buen servicio
El espacio terrestre atmosférico está caracterizado por la presencia de fenómenos o “meteoros” peculiares que son objeto central de los estudios de la meteorología. Los parámetros normalizados de los mismos se refieren a la actividad de la temperatura, lluvias, vientos y nieves, esencialmente. Tanto en sus manifestaciones estacionales como en las catastróficas; también respecto a las actuaciones sobre la muy diversificada actividad geográfica u orográfica y vital agrícola, así como civil industrial. Recientemente se está produciendo una a manera de invasión de... “atmosferianos”. En efecto, en los mencionados parámetros de estudio considerados se contienen masas de “partículas agresivas” (geo y bio), generadoras del novedoso y extendido catastrofismo, consecuente con el desarrollo, conocido como “contaminación”; muy expansivo y activo-expansivo en valores medibles. Y sobre todo, temido por los riesgos salutíferos, consecuentes con la movilización de micropartículas generadas. Sobredimensionadas por el desarrollo tecnológico, en las zonas bajas (urbano industriales), medias (circulación aérea-volcanes) y altas (ciclones, tormentas), espaciales (basura espacial) de la atmósfera tanto próxima como lejana;y no menos de la extra-atmósfera. Continuamente se está tratando de sensibilizar a la sociedad de aspectos diversos relacionados con el funcionamiento de la atmósfera, clima y sobre todo del vulgarizado estado del “tiempo” y sus predicciones de servicio social. En tal circunstancia que se me permita, con sentido didáctico, destacar esta “invasión” seguida de “expansión” de los citables como “atmosferianos”, y su mundo de partículas agresivas-destructivas, por contaminantes; portadoras de cada vez más riesgos para el desarrollo social de la Humanidad. Desde la “torre observatorio” que fuera, la del edificio fundacional de la Universidad, se realizaron percepciones-anotaciones climáticas durante largo tiempo; es la tercera históricamente más antigua de España en toma de medidas de esta índole. La creación de la cátedra climática “Princesa de Asturias” pudiera ser un buen servicio de rememoración y recreación para la actividad de nuestra Universidad en este ámbito contaminante. No deberíamos dilatar el inicio de su creación (Cátedra Ambiental Princesa de Asturias-Universidad Oviedo (CAPAO). Ésta debiera ser enfocada, dadas las circunstancias del momento, como base o inicio del que pudiera ser, con la ayuda de todos, Hospital Universitario Climático de Oviedo (HUCLO). Las contaminaciones consecuentes con las polinizaciones temporales y sus residuos reactivados son uno de los recurrentes residuos de biopartículas, alteradoras del ritmo salutífero de grandes espacios terrestres. Actividades de polución térmica –industrial o civil–, tormentas ciclónicas, térmicas y arenosas, aparecen como fenómenos eventuales de dinamización de partículas agresivas capaces de transformar incluso partículas recalentadas en incendiarias. También de tormentas de arena y lodos flotantes en el aire y alrededores de volcanes. Todos fenómenos invasivos de la atmósfera, cifrados además en micropartículas, que didácticamente calificamos como “atmosferianos”; sobre los que no se actúa con unidad de estudio, además obviando en exceso la búsqueda de respuestas salutíferas y de los correspondientes protocolos hospitalarios.
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