Ser un trabajador del Pime es ser sospechoso
Al parecer ser trabajador del Plan de Empleo Pime del Ayuntamiento de Gijón no sólo implica cobrar un salario miseria por debajo de los 800 euros, ser tratado con ninguna dignidad profesional por superiores y jefes y ser considerado socialmente como un vago,autoridades.
Me refiero en concreto a lo que pasó a un grupo de trabajadores del Pime a la entrada del recinto ferial donde se celebraba la edición correspondiente a este año de Agropec. El pasado 25 de octubre los responsables del Plan Pime decidieron que ese dia dentro del horario laboral, los trabajadores de áreas rurales y forestal iban a visitar la feria dado su supuesto interés formativo. Así poco después de las 12 del mediodía los y las trabajadores llegaban a la entrada de la feria. Allí el despliegue policial era de aupa. Desde el primer momento de la llegada de los trabajadores y mientras estaban esperando por el responsable que trajera los pases para entrar, la policía iba acercándose, vigilando ostentosamente a determinados trabajadores con pinta que para ellos, al parecer, no entraba dentro de los cánones de la normalidad. Es decir, a algunos que llevaban el pelo largo, tenían pendientes o simplemente el pelo rapado y gafas de sol. Estaba claro que la Policía pensaba que estos trabajadores del Pime en horario laboral eran peligrosos manifestantes que iban a importunar la llegada de la señora alcaldesa, los señores concejales y el señor consejero.
De esta manera cuando se disponen a entrar paran a un grupo de ellos y al resto se les deja pasar, se les registra, y les piden documentación. Pese a que el técnico encargado de estos trabajadores aparece y les explica a la Policía Nacional que son trabajadores del Ayuntamiento, estos no le hacen caso y siguen con el proceso identificatorio. Tras mas de media hora, dicen que se llevan a uno de ellos para identificarlo en comisaría, ya que pese a tener una nómina que lo identificaba, no disponía en ese momento del DNI .Detenido fue conducido a comisaría en horario laboral y tras 2 horas puesto en libertad. En ningún momento responsable alguno del Pime fue a interesarse hasta comisaría ni a recoger a este trabajador cuando lo soltaron, es más, tuvo que incluso justificar su detención dirigiéndose hasta la sede del personal del Ayuntamiento en la calle Fortuna Balnearia.
La Policía humilló de manera evidente la dignidad de estos trabajadores sólo por su aspecto, sin que hubiera ningún motivo para tales identificaciones y controles salvo los prejuicios por la forma de vestir y llevar el pelo. Incluso la Alcaldesa pasó por delante de ellos mientras los estaban registrando y no fue a interesarse por lo que pasaba, cuando de hecho es la máxima responsable de la empresa para la que trabajan.
Este hecho lamentable es sólo la gota que colma el vaso de la cantidad de despropósitos llevados contra los trabajadores y las trabajadoras de este Plan.
El desastre organizativo a todos los niveles que está suponiendo el desarrollo de este nuevo Plan es evidente en las carnes de los y las trabajadoras:
Hacinamiento en vesturarios, falta de Epis y medidas de seguridad, formación en el trabajo casi nula y cursos de formación evidentemente inadecuados.. No se puede insertar en el plan formativo profesional de trabajadores jardineros del area rural cursos como alfabetización informática..
En fin la desidia de los responsables y de los sindicatos firmantes del Plan CCOO y UGT que sólo se ocupan de los mandos superiores e intermedios, es la culpable de que todo esté en estos momentos manga por hombro. Los responsables del Ayuntamiento deberían poner mas atención y no mandar a la policía de amenazas ficticias.
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