Esto no es un club, es un .......

Ahora parece ser (según la TPA) que José Manuel Martínez (director deportivo del Real Oviedo) ha pedido consejo a Oli (?) sobre que entrenador debería ocupar el puesto de Raúl Gonzalez. Lo que pasa en este club es pa mear y no echar gota. Ya puestos ¿por qué no vende sus acciones Alberto Gonzalez a Fernández y nos convertimos en filial del Sporting?

Es muy triste estar dirigidos por quien estamos dirigidos, contrastados anti-oviedistas, que cuando el barco se hundía fueron los primeros en salir corriendo como ratas, acudiendo a la llamada del peor de todos ellos, el alcalde Gabino de Lorenzo, que mientras el barco todavía se hundía pretendió usar su madera para inventarse uno nuevo. Mientras, los que aun quedaban en el barco, su verdadero patrimonio, la mejor afición de España y del mundo (no creo que muchas aficiones puedan presumir de haber salvado la vida a su club), seguían remando con todas sus fuerzas y consiguieron llevar el barco a puerto antes de que se hundiera y una vez allí trabajar duro por su regeneración.

Pero, por desgracia, los que habían huido como ratas, al ver que el "nuevo invento" no funcionaba y que la tripulación no había abandonado su barco, volvieron, esta vez como buitres, para seguir chupando del club. Todos sabemos quienes son, gran parte de los que siguieron al alcalde en sus delirios de grandeza y formaron parte del Oviedo ACF ahora ostentan cargos de responsabilidad en el Real Oviedo y el mismo Gabino de Lorenzo ahora va por la vida de grandísimo oviedista, yo no se si nos toman por tontos o por amnésicos.

Y ahora esto, después de echar a Raúl, por capricho del dueño, a las 6 jornadas de liga (para eso que no empiece), va el señor José Manuel Martínez (ex ACF) y le pide consejo ni más ni menos que a Oli, el enemigo público número uno de la afición, el ex-capitán del Oviedo gracias al cual estamos como estamos y donde estamos. No seré yo el que intente quitar derechos a los trabajadores para reclamar lo que es suyo, pero cuando ya se había llegado a un acuerdo con todos los jugadores aquel fatídico 1 de agosto del 2003, el señor Oliverio Alvarez (Oli) a las once y media de la noche, media hora antes de que se cumpliera el plazo, decidió que no, que no le parecía bien que el aval que el club ofrecía para el pago a los jugadores fuera mancomunado, que él lo quería solidario para tener más garantías de cobro.

Evidentemente los jugadores de fútbol son trabajadores y los club empresas, pero todos sabemos que son mucho más que eso, que hay ciudades enteras, sentimientos históricos, etc, detrás de todos ellos, y Oli, capitán y supuesto grandísimo oviedista, prefirió no cobrar ni un duro y abocar a su club a la tercera división y a la más que posible desaparición (como casi ocurrió), a tener una posibilidad de cobrar, solo él sabrá lo que le pasó por la cabeza en esa hora fatídica. Pero eso ya es historia, lo que es intolerable es que el actual director deportivo le pida consejo (como si supiera algo de fútbol por cierto), que desde el club y en nombre del Real Oviedo se hable con Oli sobre asuntos que conciernen al Oviedo es un insulto a toda la afición, aunque lamentablemente ya estamos muy acostumbrados a todos estos insultos y engaños.

Eugenio Prieto sería una marioneta en manos de Celso Gonzalez, y entre los dos nos habrán llevado a la ruina económica, pero al menos sabíamos que Prieto era oviedista, que quería a este club de verdad. Hemos ido a peor, ahora nos dirigen personajillos que se creen reyes del mundo, nuevos yupis tan tristes y patéticos como los concursantes de "El aprendiz" y que, si no fuera por que están jugando con algo tan grande como el Real Oviedo, nos harían reir de la misma manera.

Está muy bien gritar en el estadio cánticos contra los dueños pidiendo que se vayan (aunque luego se le rían las gracias a Gabino de Lorenzo en la barra del chiringito de la APARO en San Mateo, Symmachiarii quien te ha visto y quien te ve). Pero esto es una sociedad anónima, ellos son los dueños, y no van a decir "si, vale, tenéis razón, nos vamos"; lo realmente triste de todo esto es que no haya oposición real, que no haya una clara alternativa, formada por empresarios asturianos, hosteleros, afición, periodistas, etc, etc, capaz de juntar el capital suficiente para ser una clara alternativa. Esta muy bien quejarse, chillar, hacer manifestaciones, escribir artículos críticos con el consejo (como éste), pero eso no sirve de nada mientras no haya una alternativa real, y hoy por hoy parece que ni la hay ni tiene visos de haberla.

Por todo ello los sportinguistas más radicales están de enhorabuena. Señores, nos vamos, desaparecemos, estamos viviendo nuestros últimos años de agonía...... Habrá que hacerse del Uni o algo......

Hala Oviedo!!!!!!!!!!!