SyneXthesia

Cuando los sonidos aún vibran en nuestros corazones y las imágenes de la emoción compartida inundan nuestras retinas, toca volver a la realidad, al día a día, al trabajo cotidiano, a nuestros problemas y alegrías. Pero ahora desde la serenidad que da la sensación del trabajo cumplido queremos trasladar nuestro agradecimiento a tantos y tantos que han hecho posible que el sueño, al menos por un día, se hiciera realidad.

No quisiéramos que el orden de mención reste importancia a nadie, pero no es posible nombrar a todos a la vez.

Permitirnos pues que nuestro primer agradecimiento sea para nuestras familias, a las que “Synexthesia” les ha supuesto horas de esperas, de tiempos de vacío, de silencios, de cambios de planes, de cenas solitarias… Ellas han sido nuestro motor y nuestro soporte emocional cuando las cosas iban bien, pero sobre todo cuando no iban tan bien.

Gracias “Bizarro Big Band” por acompañarnos en este viaje, el cual esperemos sea el comienzo de una larga travesía donde podamos seguir compartiendo un mundo de emociones que sólo el amor por la música es capaz de transmitir. Ha sido todo un placer compartir escenario con vosotros, los mejores cómplices para vivir la aventura, gracias a Cristóbal Iglesias por creer desde el principio en este proyecto.

Gracias a Jorge Méndez por entender nuestra locura y ser capaz de plasmarla en un pentagrama donde cada nota era un mensaje de emociones directas al corazón.

Gracias Azucena Bedia, porque supiste ver en cada uno de nosotros esa imagen oculta y un poco canalla que cada uno tenemos, hiciste que unas simples telas fueran una sinfonía de color y emoción que nos transformó por una noche. Gracias Imanol Núñez, nos ganaste desde el primer momento, nos hiciste vibrar, nos contagiaste de alegría y tu sonrisa nos robó un poco del corazón. Gracias Javier Tejedor, conseguiste arrancarnos una lagrima de emoción, convertir el momento en algo mágico, la mejor foto para saber lo que es sentir la música.

Gracias a Manuel Badás, el mejor ejemplo de la Synexthesia, capaz de transformar sonidos en movimiento y el movimiento en emociones. Gracias Jorge Viejo, un placer contar con tu apoyo y calidad musical. Gracias Nacho Quesada por convertir nuestra idea de Synexthesia en imagen gráfica. Gracias a Alquisón por su compromiso con este proyecto, nos hicisteis sentir grandes en el escenario. Gracias a Sergio Rodríguez, “Tutu”, por su profesionalidad, paciencia y maestría a los mandos de la nave sonora. Gracias a nuestros amigos de BP Producciones Visuales, por hacer vuestra la Synexthesia y ser nuestros ojos en la producción y edición visual. Gracias a ASDECO “El Estudio”, por su apoyo en la edición gráfica y trasladar nuestras imágenes a papel. Gracias a Iván Martínez por hacernos un hueco en su agenda para captar con su cámara lo que allí estaba pasando. Gracias a Juanjo Castro por ser capaz de ver a través de su objetivo las imágenes que en ocasiones oculta la oscuridad. Gracias a Fernando García (FERGA) por facilitarnos un espacio físico donde poder trabajar musicalmente nuestra locura. Gracias al Ayuntamiento de Oviedo a través de su Concejalía de Cultura y en particular de la SOF por su apoyo, por entender nuestras necesidades y por permitirnos mostrar nuestro trabajo en el mejor escenario posible, el Auditorio Príncipe Felipe. Gracias a Belén Fernández por su ayuda y mil gracias a Roberto Sánchez, “Rivi”, que supo recoger el testigo y desde el primer momento contamos con su apoyo, su cercanía y su compromiso con el proyecto. Gracias a todos los que desde el teléfono o el mail nos gestionasteis contactos, coordinasteis reuniones y facilitasteis nuestro trabajo gracias al vuestro. Gracias a Ángeles Solís, directora del Palacio de Congresos, y a todo el equipo humano del Auditorio por su profesionalidad y por hacer que nos sintiéramos como en nuestra propia casa. Gracias a los medios de comunicación por la difusión del evento, especialmente a Aurelio Argel por estar año tras año siempre ahí. Pero no quisiéramos olvidarnos tampoco de aquellos que estuvieron donde nosotros no podíamos estar, ellos fueron nuestra imagen, nuestra voz o nuestras manos, recibiendo y acompañando a la gente, dando explicaciones, haciendo fotos o detrás del escenario haciendo que las cosas estuvieran donde tenían que estar. Las gracias más afectuosas para Marga, Pilar, Flor, María José, Miguel, Andrés, Héctor y Adrián.

Y nuestras gracias más sinceras y cariñosas a todos vosotros, a los que quisisteis vivir Synexthesia con nosotros, nos sorprendisteis con vuestra numerosa presencia, nos emocionasteis con vuestros aplausos, nos contagiasteis vuestra alegría, nos hicisteis llorar y reír, nos hicisteis sentir muy felices. La magia vivida, muestra de la complicidad espontanea, permitió transformar por un momento la realidad de cada uno y hacernos sentir a todos interpretes de un mismo guion, un hilo conductor que como cordón umbilical se extendía desde el escenario a las butacas y desde estas al escenario, por fin la palabra tan buscada había cumplido su misión. ¡Tocando sentíos!

Miguel Mada, presidente de la banda de gaitas "Xácara", Oviedo.

Cuando los sonidos aún vibran en nuestros corazones y las imágenes de la emoción compartida inundan nuestras retinas, toca volver a la realidad, al día a día, al trabajo cotidiano, a nuestros problemas y alegrías. Pero ahora desde la serenidad que da la sensación del trabajo cumplido queremos trasladar nuestro agradecimiento a tantos y tantos que han hecho posible que el sueño, al menos por un día, se hiciera realidad.

No quisiéramos que el orden de mención reste importancia a nadie, pero no es posible nombrar a todos a la vez.

Permitirnos pues que nuestro primer agradecimiento sea para nuestras familias, a las que “Synexthesia” les ha supuesto horas de esperas, de tiempos de vacío, de silencios, de cambios de planes, de cenas solitarias… Ellas han sido nuestro motor y nuestro soporte emocional cuando las cosas iban bien, pero sobre todo cuando no iban tan bien.

Gracias “Bizarro Big Band” por acompañarnos en este viaje, el cual esperemos sea el comienzo de una larga travesía donde podamos seguir compartiendo un mundo de emociones que sólo el amor por la música es capaz de transmitir. Ha sido todo un placer compartir escenario con vosotros, los mejores cómplices para vivir la aventura, gracias a Cristóbal Iglesias por creer desde el principio en este proyecto.

Gracias a Jorge Méndez por entender nuestra locura y ser capaz de plasmarla en un pentagrama donde cada nota era un mensaje de emociones directas al corazón.

Gracias Azucena Bedia, porque supiste ver en cada uno de nosotros esa imagen oculta y un poco canalla que cada uno tenemos, hiciste que unas simples telas fueran una sinfonía de color y emoción que nos transformó por una noche. Gracias Imanol Núñez, nos ganaste desde el primer momento, nos hiciste vibrar, nos contagiaste de alegría y tu sonrisa nos robó un poco del corazón. Gracias Javier Tejedor, conseguiste arrancarnos una lagrima de emoción, convertir el momento en algo mágico, la mejor foto para saber lo que es sentir la música.

Gracias a Manuel Badás, el mejor ejemplo de la Synexthesia, capaz de transformar sonidos en movimiento y el movimiento en emociones. Gracias Jorge Viejo, un placer contar con tu apoyo y calidad musical. Gracias Nacho Quesada por convertir nuestra idea de Synexthesia en imagen gráfica. Gracias a Alquisón por su compromiso con este proyecto, nos hicisteis sentir grandes en el escenario. Gracias a Sergio Rodríguez, “Tutu”, por su profesionalidad, paciencia y maestría a los mandos de la nave sonora. Gracias a nuestros amigos de BP Producciones Visuales, por hacer vuestra la Synexthesia y ser nuestros ojos en la producción y edición visual. Gracias a ASDECO “El Estudio”, por su apoyo en la edición gráfica y trasladar nuestras imágenes a papel. Gracias a Iván Martínez por hacernos un hueco en su agenda para captar con su cámara lo que allí estaba pasando. Gracias a Juanjo Castro por ser capaz de ver a través de su objetivo las imágenes que en ocasiones oculta la oscuridad. Gracias a Fernando García (FERGA) por facilitarnos un espacio físico donde poder trabajar musicalmente nuestra locura. Gracias al Ayuntamiento de Oviedo a través de su Concejalía de Cultura y en particular de la SOF por su apoyo, por entender nuestras necesidades y por permitirnos mostrar nuestro trabajo en el mejor escenario posible, el Auditorio Príncipe Felipe. Gracias a Belén Fernández por su ayuda y mil gracias a Roberto Sánchez, “Rivi”, que supo recoger el testigo y desde el primer momento contamos con su apoyo, su cercanía y su compromiso con el proyecto. Gracias a todos los que desde el teléfono o el mail nos gestionasteis contactos, coordinasteis reuniones y facilitasteis nuestro trabajo gracias al vuestro. Gracias a Ángeles Solís, directora del Palacio de Congresos, y a todo el equipo humano del Auditorio por su profesionalidad y por hacer que nos sintiéramos como en nuestra propia casa. Gracias a los medios de comunicación por la difusión del evento, especialmente a Aurelio Argel por estar año tras año siempre ahí. Pero no quisiéramos olvidarnos tampoco de aquellos que estuvieron donde nosotros no podíamos estar, ellos fueron nuestra imagen, nuestra voz o nuestras manos, recibiendo y acompañando a la gente, dando explicaciones, haciendo fotos o detrás del escenario haciendo que las cosas estuvieran donde tenían que estar. Las gracias más afectuosas para Marga, Pilar, Flor, María José, Miguel, Andrés, Héctor y Adrián.

Y nuestras gracias más sinceras y cariñosas a todos vosotros, a los que quisisteis vivir Synexthesia con nosotros, nos sorprendisteis con vuestra numerosa presencia, nos emocionasteis con vuestros aplausos, nos contagiasteis vuestra alegría, nos hicisteis llorar y reír, nos hicisteis sentir muy felices. La magia vivida, muestra de la complicidad espontanea, permitió transformar por un momento la realidad de cada uno y hacernos sentir a todos interpretes de un mismo guion, un hilo conductor que como cordón umbilical se extendía desde el escenario a las butacas y desde estas al escenario, por fin la palabra tan buscada había cumplido su misión. ¡Tocando sentíos!

Miguel Mada, presidente de la banda de gaitas "Xácara", Oviedo.

Cuando los sonidos aún vibran en nuestros corazones y las imágenes de la emoción compartida inundan nuestras retinas, toca volver a la realidad, al día a día, al trabajo cotidiano, a nuestros problemas y alegrías. Pero ahora desde la serenidad que da la sensación del trabajo cumplido queremos trasladar nuestro agradecimiento a tantos y tantos que han hecho posible que el sueño, al menos por un día, se hiciera realidad.

No quisiéramos que el orden de mención reste importancia a nadie, pero no es posible nombrar a todos a la vez.

Permitirnos pues que nuestro primer agradecimiento sea para nuestras familias, a las que “Synexthesia” les ha supuesto horas de esperas, de tiempos de vacío, de silencios, de cambios de planes, de cenas solitarias… Ellas han sido nuestro motor y nuestro soporte emocional cuando las cosas iban bien, pero sobre todo cuando no iban tan bien.

Gracias “Bizarro Big Band” por acompañarnos en este viaje, el cual esperemos sea el comienzo de una larga travesía donde podamos seguir compartiendo un mundo de emociones que sólo el amor por la música es capaz de transmitir. Ha sido todo un placer compartir escenario con vosotros, los mejores cómplices para vivir la aventura, gracias a Cristóbal Iglesias por creer desde el principio en este proyecto.

Gracias a Jorge Méndez por entender nuestra locura y ser capaz de plasmarla en un pentagrama donde cada nota era un mensaje de emociones directas al corazón.

Gracias Azucena Bedia, porque supiste ver en cada uno de nosotros esa imagen oculta y un poco canalla que cada uno tenemos, hiciste que unas simples telas fueran una sinfonía de color y emoción que nos transformó por una noche. Gracias Imanol Núñez, nos ganaste desde el primer momento, nos hiciste vibrar, nos contagiaste de alegría y tu sonrisa nos robó un poco del corazón. Gracias Javier Tejedor, conseguiste arrancarnos una lagrima de emoción, convertir el momento en algo mágico, la mejor foto para saber lo que es sentir la música.

Gracias a Manuel Badás, el mejor ejemplo de la Synexthesia, capaz de transformar sonidos en movimiento y el movimiento en emociones. Gracias Jorge Viejo, un placer contar con tu apoyo y calidad musical. Gracias Nacho Quesada por convertir nuestra idea de Synexthesia en imagen gráfica. Gracias a Alquisón por su compromiso con este proyecto, nos hicisteis sentir grandes en el escenario. Gracias a Sergio Rodríguez, “Tutu”, por su profesionalidad, paciencia y maestría a los mandos de la nave sonora. Gracias a nuestros amigos de BP Producciones Visuales, por hacer vuestra la Synexthesia y ser nuestros ojos en la producción y edición visual. Gracias a ASDECO “El Estudio”, por su apoyo en la edición gráfica y trasladar nuestras imágenes a papel. Gracias a Iván Martínez por hacernos un hueco en su agenda para captar con su cámara lo que allí estaba pasando. Gracias a Juanjo Castro por ser capaz de ver a través de su objetivo las imágenes que en ocasiones oculta la oscuridad. Gracias a Fernando García (FERGA) por facilitarnos un espacio físico donde poder trabajar musicalmente nuestra locura. Gracias al Ayuntamiento de Oviedo a través de su Concejalía de Cultura y en particular de la SOF por su apoyo, por entender nuestras necesidades y por permitirnos mostrar nuestro trabajo en el mejor escenario posible, el Auditorio Príncipe Felipe. Gracias a Belén Fernández por su ayuda y mil gracias a Roberto Sánchez, “Rivi”, que supo recoger el testigo y desde el primer momento contamos con su apoyo, su cercanía y su compromiso con el proyecto. Gracias a todos los que desde el teléfono o el mail nos gestionasteis contactos, coordinasteis reuniones y facilitasteis nuestro trabajo gracias al vuestro. Gracias a Ángeles Solís, directora del Palacio de Congresos, y a todo el equipo humano del Auditorio por su profesionalidad y por hacer que nos sintiéramos como en nuestra propia casa. Gracias a los medios de comunicación por la difusión del evento, especialmente a Aurelio Argel por estar año tras año siempre ahí. Pero no quisiéramos olvidarnos tampoco de aquellos que estuvieron donde nosotros no podíamos estar, ellos fueron nuestra imagen, nuestra voz o nuestras manos, recibiendo y acompañando a la gente, dando explicaciones, haciendo fotos o detrás del escenario haciendo que las cosas estuvieran donde tenían que estar. Las gracias más afectuosas para Marga, Pilar, Flor, María José, Miguel, Andrés, Héctor y Adrián.

Y nuestras gracias más sinceras y cariñosas a todos vosotros, a los que quisisteis vivir Synexthesia con nosotros, nos sorprendisteis con vuestra numerosa presencia, nos emocionasteis con vuestros aplausos, nos contagiasteis vuestra alegría, nos hicisteis llorar y reír, nos hicisteis sentir muy felices. La magia vivida, muestra de la complicidad espontanea, permitió transformar por un momento la realidad de cada uno y hacernos sentir a todos interpretes de un mismo guion, un hilo conductor que como cordón umbilical se extendía desde el escenario a las butacas y desde estas al escenario, por fin la palabra tan buscada había cumplido su misión. ¡Tocando sentíos!

Miguel Mada, presidente de la banda de gaitas "Xácara", Oviedo.

Cuando los sonidos aún vibran en nuestros corazones y las imágenes de la emoción compartida inundan nuestras retinas, toca volver a la realidad, al día a día, al trabajo cotidiano, a nuestros problemas y alegrías. Pero ahora desde la serenidad que da la sensación del trabajo cumplido queremos trasladar nuestro agradecimiento a tantos y tantos que han hecho posible que el sueño, al menos por un día, se hiciera realidad.

No quisiéramos que el orden de mención reste importancia a nadie, pero no es posible nombrar a todos a la vez.

Permitirnos pues que nuestro primer agradecimiento sea para nuestras familias, a las que “Synexthesia” les ha supuesto horas de esperas, de tiempos de vacío, de silencios, de cambios de planes, de cenas solitarias… Ellas han sido nuestro motor y nuestro soporte emocional cuando las cosas iban bien, pero sobre todo cuando no iban tan bien.

Gracias “Bizarro Big Band” por acompañarnos en este viaje, el cual esperemos sea el comienzo de una larga travesía donde podamos seguir compartiendo un mundo de emociones que sólo el amor por la música es capaz de transmitir. Ha sido todo un placer compartir escenario con vosotros, los mejores cómplices para vivir la aventura, gracias a Cristóbal Iglesias por creer desde el principio en este proyecto.

Gracias a Jorge Méndez por entender nuestra locura y ser capaz de plasmarla en un pentagrama donde cada nota era un mensaje de emociones directas al corazón.

Gracias Azucena Bedia, porque supiste ver en cada uno de nosotros esa imagen oculta y un poco canalla que cada uno tenemos, hiciste que unas simples telas fueran una sinfonía de color y emoción que nos transformó por una noche. Gracias Imanol Núñez, nos ganaste desde el primer momento, nos hiciste vibrar, nos contagiaste de alegría y tu sonrisa nos robó un poco del corazón. Gracias Javier Tejedor, conseguiste arrancarnos una lagrima de emoción, convertir el momento en algo mágico, la mejor foto para saber lo que es sentir la música.

Gracias a Manuel Badás, el mejor ejemplo de la Synexthesia, capaz de transformar sonidos en movimiento y el movimiento en emociones. Gracias Jorge Viejo, un placer contar con tu apoyo y calidad musical. Gracias Nacho Quesada por convertir nuestra idea de Synexthesia en imagen gráfica. Gracias a Alquisón por su compromiso con este proyecto, nos hicisteis sentir grandes en el escenario. Gracias a Sergio Rodríguez, “Tutu”, por su profesionalidad, paciencia y maestría a los mandos de la nave sonora. Gracias a nuestros amigos de BP Producciones Visuales, por hacer vuestra la Synexthesia y ser nuestros ojos en la producción y edición visual. Gracias a ASDECO “El Estudio”, por su apoyo en la edición gráfica y trasladar nuestras imágenes a papel. Gracias a Iván Martínez por hacernos un hueco en su agenda para captar con su cámara lo que allí estaba pasando. Gracias a Juanjo Castro por ser capaz de ver a través de su objetivo las imágenes que en ocasiones oculta la oscuridad. Gracias a Fernando García (FERGA) por facilitarnos un espacio físico donde poder trabajar musicalmente nuestra locura. Gracias al Ayuntamiento de Oviedo a través de su Concejalía de Cultura y en particular de la SOF por su apoyo, por entender nuestras necesidades y por permitirnos mostrar nuestro trabajo en el mejor escenario posible, el Auditorio Príncipe Felipe. Gracias a Belén Fernández por su ayuda y mil gracias a Roberto Sánchez, “Rivi”, que supo recoger el testigo y desde el primer momento contamos con su apoyo, su cercanía y su compromiso con el proyecto. Gracias a todos los que desde el teléfono o el mail nos gestionasteis contactos, coordinasteis reuniones y facilitasteis nuestro trabajo gracias al vuestro. Gracias a Ángeles Solís, directora del Palacio de Congresos, y a todo el equipo humano del Auditorio por su profesionalidad y por hacer que nos sintiéramos como en nuestra propia casa. Gracias a los medios de comunicación por la difusión del evento, especialmente a Aurelio Argel por estar año tras año siempre ahí. Pero no quisiéramos olvidarnos tampoco de aquellos que estuvieron donde nosotros no podíamos estar, ellos fueron nuestra imagen, nuestra voz o nuestras manos, recibiendo y acompañando a la gente, dando explicaciones, haciendo fotos o detrás del escenario haciendo que las cosas estuvieran donde tenían que estar. Las gracias más afectuosas para Marga, Pilar, Flor, María José, Miguel, Andrés, Héctor y Adrián.

Y nuestras gracias más sinceras y cariñosas a todos vosotros, a los que quisisteis vivir Synexthesia con nosotros, nos sorprendisteis con vuestra numerosa presencia, nos emocionasteis con vuestros aplausos, nos contagiasteis vuestra alegría, nos hicisteis llorar y reír, nos hicisteis sentir muy felices. La magia vivida, muestra de la complicidad espontanea, permitió transformar por un momento la realidad de cada uno y hacernos sentir a todos interpretes de un mismo guion, un hilo conductor que como cordón umbilical se extendía desde el escenario a las butacas y desde estas al escenario, por fin la palabra tan buscada había cumplido su misión. ¡Tocando sentíos!

Miguel Mada, presidente de la banda de gaitas "Xácara", Oviedo.