La Nueva España » Cartas de los lectores » Que no nos salven, por favor.

Que no nos salven, por favor.

30 de Diciembre del 2015 - Raúl Castro Sánchez de Rojas (Avilés)

Trabajo en Dupont desde hace casi 24 años y este hecho me impide dar una opinión totalmente objetiva. Tampoco es eso lo que pretendo. Algunas aclaraciones previas:

.- Estar sindicado no influyó negativamente en la contratación de empleados. Yo pertenecía a un sindicato cuando entré en la plantilla y nadie me preguntó sobre el tema. Claro que el hecho de estar sindicado tampoco influyó positivamente como pasa en muchas empresas que nos rodean. ¿Quién se mueve y quien sale en la foto entonces?

.- Yo no veo apoyo por parte de la plantilla a la entrada de sindicatos. Estamos preocupados por el hecho y en general no sentimos necesidad de ser salvados. Es triste, pero la noticia nos vino por la dirección de la empresa y no por nuestros futuros representantes. Empezamos bien.

Todos estos años me han permitido tener una buena relación con mis compañeros, incluidos mis jefes y quisiera que siguiera así. Trabajar contento no es un gran logro sindical, pero yo lo aprecio mucho. Por supuesto que han existido y existirán momentos de tensión y que actualmente hay muchas cosas mejorables pero ¿Es la entrada de sindicatos la solución? Si miramos como les ha ido a las empresas de nuestro entorno me da miedo responder a la pregunta.

No, no estoy entusiasmado con la entrada de sindicatos en Dupont, creo que es el peor momento posible. Asturias es conocida y reconocida dentro de Dupont, entre otras cosas, por no tener conflictividad laboral y esto tal vez es la razón de que exista todavía aquí. Tanto empresa como trabajadores apreciamos este logro. En momento de crisis, mejor seguir así.

Negar la necesidad y los logros de los sindicatos en siglos pasados sería estúpido, pero, tal y como han evolucionado las empresas y, sobre todo, los representantes sindicales de este país, ya no aportan nada positivo, son más bien un estorbo. Los grandes sindicatos hace tiempo que dejaron de servir al trabajador y se han convertido en una de esas cargas estatales tan abundantes como innecesarias en España. Si los grandes sindicatos (todos sabemos de quienes estoy hablando) devuelven el dinero robado, piden perdón y empiezan a escuchar al trabajador del siglo XXI, bienvenidos sean. Si los grandes sindicatos entran para demostrar que tienen la sartén por el mango e implantan el régimen mafioso que domina en otras empresas, no tendrán mi apoyo y lloraré por los tiempos pasados, porque estoy convencido de que las cosas irán a peor.

Cartas

Número de cartas: 46070

Número de cartas en Octubre: 8

Tribunas

Número de tribunas: 2087

Número de tribunas en Octubre: 1

Condiciones
Enviar carta por internet

Debe rellenar todos los datos obligatorios solicitados en el formulario. Las cartas deberán tener una extensión equivalente a un folio a doble espacio y podrán ser publicadas tanto en la edición impresa como en la digital.

» Formulario de envío.

Enviar carta por correo convencional

Las cartas a esta sección deberán remitirse mecanografiadas, con una extensión aconsejada de un folio a doble espacio y acompañadas de nombre y apellidos, dirección, fotocopia del DNI y número de teléfono de la persona o personas que la firman a la siguiente dirección:

Calvo Sotelo, 7, 33007 Oviedo
Buscador