La demagogia y la hucha de las pensiones
El problema de financiación que desde que entramos en crisis tiene nuestra caja de pensiones es tema harto recurrente en los foros de opinión. Todos creemos tener soluciones y muchos culpan de la situación al actual Gobierno, reprochándole las veces que lleva recurriendo al fondo de reserva o hucha de las pensiones para seguir pagándonos cada mes nuestras pensiones.
LA NUEVA ESPAÑA del pasado 29 de diciembre publicaba una carta firmada por un señor de Gijón que ponía al señor Rajoy más que de vuelta y media porque, según afirmaba este señor, el actual presidente del Gobierno había vuelto a meter la mano al dinero de la hucha de reserva para pagar las pensiones y añadía: vaya desgracia que van a tener los pensionistas en el futuro, estando este señor en el poder.
Yo no soy votante del PP, ni tengo relación de ningún tipo con nadie de ese partido, pero creo que lo peor que podemos hacer a la hora de analizar la situación de nuestro sistema de pensiones es recurrir a la demagogia y a sentimientos partidistas o ideológicos utilizándolos como arma arrojadiza para tratar de desprestigiar a quienes gobiernan en cada momento si no son de nuestra tendencia política. En mi opinión, según el criterio de cualquier ciudadano que quiera analizar este asunto con imparcialidad, debería recurrir más a la aritmética y menos a sus sentimientos políticos. Tenemos un sistema público de pensiones que es de reparto, lo que indica que se nutre de las cotizaciones empresariales y de los pocos asalariados que aún trabajan. Mientras hubo empleo suficiente, las cotizaciones llegaban no sólo a cubrir el gasto en pensiones, sino que, además, generaban superávit que iba a engrosar el contenido de la famosa hucha de pensiones. Con la crisis, la bajada del empleo fue tan brutal que desde entonces las cotizaciones no son suficientes para hacer frente al pago de pensiones del cada vez mayor número de pensionistas, lo que obliga al Gobierno, periódicamente, a solicitar permiso a la Comisión del Pacto de Toledo para retirar partidas del fondo de reserva o hucha de pensiones. Cada vez que lo hacen, lo publica el BOE, y pienso yo que si tal como algún lenguaraz dice estuviesen metiendo la mano o sacando dinero de esa hucha para otros fines distintos al pago de pensiones tendrían a toda la oposición -con razón- tirándoseles a la yugular. La propia Comisión del Pacto de Toledo, que yo sepa, es multipartidista y supongo que no se dejará manipular a voluntad del partido en el Gobierno.
Por todo lo expuesto, pienso que deberíamos ser más sensatos y comedidos al tratar estos temas. La hucha de las pensiones ni la llenó entonces el señor Zapatero, ni ahora la está vaciando el señor Rajoy. Entonces eran años de vacas gordas y ahora estamos en época de vacas flacas. Diecisiete millones de cotizantes actuales no son suficientes para mantener a nueve millones de pensionistas. Desconozco cuál será la solución para resolver el problema y deseo, como pensionista que soy, que pronto la encuentren, pero sí sé que con demagogia y patochadas ideológicas nunca se va a encontrar solución a algo que nos afecta y afectará a tantos.
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