Plaza de la amnesia histórica
"Roban la placa de la plaza del Caudillo en El Pardo". Así rezaba una noticia que vi ayer en twiter. Un simpático transeúnte prefirió dejar un cartel (al amparo de la noche) profesando su deseo de preferir llevárse dicha placa a su casa antes de dejar que viniesen dos operarios municipales cincel en mano y la arrancasen para después colocarla delicadamente en una caja de cartón rota, acto seguido tirarla a la parte trasera del furgón y que quizás, y solo quizás, acabase dicha caja (por una serie de catastróficas desdichas, por supuesto) en la chatarrería más próxima. Un ovetense de 20 años como yo puede sacar a limpio muchas cosas viendo esto, y mas en mi situación viendo como poco a poco se van cargando el patrimonio histórico de Oviedo por culpa de una ley cúspide de la ignorancia humana. A pesar de mi juventud creo acertar al decir que se están olvidando un poco los valores de la Transición y, dato bastante sorprendente viendo el año en el que estamos, parece haber ahora mas antifranquistas que en el 74' (esto último dicho por una serie de personas habituales en las tertulias, todos con el brazo en alto y mirando al sol de frente, por supuesto). Aparte del gigantesco problema que supone borrar parte de la historia de un pueblo (ustedes ya saben el dicho, no voy a repetirlo), agravante es el afán de las personas impulsoras de tan moderna y salvadora medida el querer no solo borrar esta historia, sino sustituirla por la que, según ellos, debió ser (veo la mano negra de Cucurull por aquí...). ¿Por qué digo esto?, poniendo un ejemplo todos vimos hace algo de tiempo la intención de cambiar el nombre de la plaza La Gesta (la Gesta de Oviedo) por plaza Nelson Mandela (todos mis respetos a este hombre). Venidos al caso, si retrocedemos 79 años atrás hasta 1936 (lo siento, es una de las consecuencias de esta ley, volver al pasado), Oviedo estaba cercado por el bando Republicano. Todos sabemos lo que hubiese pasado si el cerco se hubiese roto (solo hace falta retroceder 2 años mas atrás): básicamente se hubiese pasado a dinamita toda la ciudad y, muy probablemente y como consecuencia de la falta de control por parte del gobierno republicano en los inicios de la guerra, pasado a cuchillo a la población allí establecida. Como ovetense que soy admiro y respeto profundamente a esta maravillosa ciudad, creo firmemente en que su aspecto seria considerablemente distinto si la historia hubiese sido otra. Entonces, ¿por qué tomarse el nombre La Gesta como algo malo, algo franquista?. Si durante la Guerra Civil la resistencia de esta ciudad fue mal vista a ojos de determinados personajes como deberíamos llamar a dicha plaza, ¿plaza La Destrucción de Oviedo?. Quizás eso hubiese sido lo correcto. Creo que de seguir así lo próximo sera quitar las chapas del Ministerio de Vivienda que hay en los portales (muchos hoy en día). Oye, o tirar los edificios directamente, que son fachas.
Debe rellenar todos los datos obligatorios solicitados en el formulario. Las cartas deberán tener una extensión equivalente a un folio a doble espacio y podrán ser publicadas tanto en la edición impresa como en la digital.
Las cartas a esta sección deberán remitirse mecanografiadas, con una extensión aconsejada de un folio a doble espacio y acompañadas de nombre y apellidos, dirección, fotocopia del DNI y número de teléfono de la persona o personas que la firman a la siguiente dirección:
Calvo Sotelo, 7, 33007 Oviedo