Pablo Iglesias, de esmoquin
No es de recibo que Pablo Iglesias, el líder de Podemos, haya acudido a las dos comparecencias que tuvo hace poco con el Rey vestido con unos vaqueros y una camisa remangada y a la Gala de los Goya se haya presentado de esmoquin, como si uno de los premios se lo fueran a dar a él. Es cierto que el hábito no hace al monje, pero ayuda a saber que lo es. Y en el caso que nos ocupa, Pablo Iglesias debería vestir correctamente cuando procede. Como es: ir al Congreso de los Diputados o acudir a ver al Jefe del Estado. Alguno pensará que eso de la vestimenta es peccata minuta y que cada uno puede vestirse como quiera. Aunque dudo mucho que quien lo dice fuera de chándal el día que le entrevistaron en su trabajo o el de su boda. Volviendo a Iglesias, empieza a crear cierto hartazgo esa obsesión casi enfermiza que tiene por despuntar. Para conseguirlo, hace de todo un espectáculo. Quizá debería dedicarse a él.
Debe rellenar todos los datos obligatorios solicitados en el formulario. Las cartas deberán tener una extensión equivalente a un folio a doble espacio y podrán ser publicadas tanto en la edición impresa como en la digital.
Las cartas a esta sección deberán remitirse mecanografiadas, con una extensión aconsejada de un folio a doble espacio y acompañadas de nombre y apellidos, dirección, fotocopia del DNI y número de teléfono de la persona o personas que la firman a la siguiente dirección:
Calvo Sotelo, 7, 33007 Oviedo