El Coro "Allegro" de Nava y su legado musical
Como si el tiempo quisiera, se cumplen tres años del fallecimiento de Pepe el Turráu, nuestro presidente, pero sobre todo nuestro director del Coro de Nava, como se conoce popularmente en la villa.
Fueron muchos años de entradas y salidas de voces corales de todo tipo, de historias personales, familiares y de amistades unidas bajo el único lenguaje universal existente, unidas al lenguaje de la música, y, como si el tiempo quisiera, después de tres años desde que nos dejó nuestro infatigable maestro y moldeador de voces, nuestro amigo y paciente director Pepe el Turráu, nos acompaña otro director joven, con idénticas características humanas de paciencia, lenguaje musical y aguante personal, para seguir con esa escuela de idioma universal y enseñarnos a cantar, enseñarnos la música coral, como digo, con una paciencia heredada, como si el tiempo quisiera, aunque con una dimensión más moderna, pero con la misma e idéntica pasión musical, humana y de entendimiento para con los coristas, pues todos, en mayor o menor grado, somos unos legos musicales y nos hizo, nos hace, gracias a esas características personales y especiales que tiene, un grupo que suena con un gusto armónico y coral digno de los mejores, obra inequívoca del legado dejado por Pepe y seguida hoy por Manuel, como si el tiempo quisiera, porque ambos tienen el mismo don musical, el mismo lenguaje universal humano para con los coristas y la misma paciencia por hacer de un grupo de vecinos de muy diversa índole personal un grupo musical con los mismos valores que nuestros directores tienen y nos trasmiten, como si el tiempo quisiera, con la misma entrega, pasión, paciencia y trato personal.
Como si el tiempo quisiera, no tuve la fuerza o ese momento preciso para agradecer públicamente a Pepe todo lo que hizo por la música, por Nava y por todos nosotros, y hoy, en vísperas de nuestro primer gran concierto y de ese tercer aniversario de su inesperada muerte y su imborrable herencia recibida para un coro de pueblu, es un momento de rendir tributo a todos los coristas que durante más de 40 años fue moldeando Pepe y dejando tras de sí un reguero de voces populares y que hoy, fruto de esa entrega altruista y abnegada, podemos seguir brindando, gracias al mismo espíritu y entrega de nuestro actual director, Manuel, el único lenguaje universal existente, que no es otro que el musical.
Como si el tiempo quisiera, sirvan estas breves líneas para agradecer todos el legado humano, vecinal y musical dejado por Pepe, así como un recuerdo entrañable para todos los que nos dejaron a lo largo de estos más de 40 años del Coro "Allegro", y que con nuevas voces, ilusiones y el paciente y entrañable director, Manuel, seamos capaces de mantener vivo, en estos tiempos tan convulsos, el único lenguaje universal existente, legado por nuestro inolvidable Pepe, como fuente viva de transmisión de los mejores valores sociales y de convivencia. Gracias, Pepe el Turráu.
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