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Ni amor sin comer, ni vestido de gala sin otro tener

21 de Marzo del 2016 - José Viñas García (Oviedo)

Está de moda el criticar a los nuevos parlamentarios de Podemos por su look, sin pararse a pensar que lo más importante en un vestido es la persona que lo lleva dentro, y que la apariencia de las personas por el vestir, no siempre es lo que son y corresponde a su verdadera naturaleza. Lo estamos viendo con la cantidad de sinvergüenzas corruptos vestidos con traje y corbata.

Mira que tienen motivos para criticarles, porque su inexperiencia les hace cometer errores de bulto, pero hacerlo sobre su indumentaria es perder todo argumento.

Me recuerda cuando los Beatles cuesta a los mayores aceptar tendencias de juventud. Por aquella se decía de ellos que eran unos melenudos, olían mal, que sus formas de vestir eran amariconadas y muchas cosas más. Pues, imaginen que decían de nosotros, nuestros padres, vecinos y familiares cuando copiamos su look. Resulta que ahora son un referente musical para todas las edades, y poco queda de su manera de vestir.

Los trasnochados no pueden seguir marcando el guion y tratar de desprestigiar a estos jóvenes por su coleta o camisa. Quizás mañana nos demos cuentan que el hábito no hacía al monje. El lenguaje y el hacer son el vestido de los pensamientos. Para éste debiéramos mirar.

Si por su apariencia en el vestir los juzgamos, también cabria hacerlo por su belleza o limitaciones de cualquier otro tipo. No me sean simples. El mundo prospera, las modas pasan y a estos jóvenes les ocurrirá como a nosotros, se irán amoldando con la edad a estilos tradicionales, esos que gustan a los anclados en el pasado.

Gracias siempre a los inconformistas, a los que se saltan las normas establecidas, a los que están dispuestos a innovar y cambiar gracias a ellos, el mundo progresa y evoluciona siempre para mejor.

Estos jóvenes muestran su rebeldía en el vestir para demostrar que ir bien vestido no te hace mejor político, quieren diferenciarse de los golfos trajeados que sufrimos en los últimos tiempos. Además irán asumiendo su papel con el tiempo. Se irán adaptando y admitiendo que la presencia si tiene algún sentido de cara a conseguir cosas de personajes con prejuicios como ustedes, los que les critican con tanta mala saña, y que son los que acaparan el poder de todo tipo, porque no se quieren ir, no dejan sitio a los jóvenes, que sean ellos quienes fragüen su futuro, quienes tendrán el mismo derecho a equivocarse e ir rectificando, como ustedes y todos lo hemos hecho.

Solo me queda decir que tener reuniones fallidas tratando de conseguir pactos de gobierno o investidura, no es ninguna mercadería. Y si todos nos pusiéramos a decir quien quisiéramos que gobernara, saldrían cientos candidatos sin pasar por las urnas, eso no es democracia. Es como en el vestir de los demás, querer imponer nuestro criterio como el único y mejor.

Más pronto que tarde, una mujer será presidenta del gobierno español, pero no pretendamos nombrarla a dedo como hace el PP. Ellas están ahí, la que esté preparada saltará cuando menos lo esperemos, pero colocar a Santamaría y Susana como futuras candidatas creo que es faltar al respeto a las muchas mujeres con niveles muy superiores a éstas en todo.

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