Isidoro
Hace unos días, tuve la oportunidad de ver en la cadena de tv La Sexta un reportaje sobre la figura de Felipe González. Espero que pronto ésta cadena pueda ofrecernos uno similar, por ejemplo, sobre Jorge Verstrynge, con lo cual tendríamos dos ejemplos vivos de involución y evolución en la política y en la vida. Verstrynge es un rara avis en política, llegó a ser el todopoderoso Secretario General de Alianza Popular (la derecha extrema, heredera del franquismo y antecedente del actual PP) para terminar, en la actualidad, desde su puesto de profesor titular en la Universidad Complutense en un furibundo crítico del neoliberalismo y muy cercano a los movimientos del 15-M y a Podemos.
Por el contrario Felipe González que empezó su compromiso político en la clandestinidad, con el seudónimo de Isidoro, luchando contra el franquismo y dirigiendo un partido marxista desde 1972, hoy es una sombra de lo que fue.
Empecé a militar en el PSOE en 1979, al año siguiente conocí a Felipe González. Si por entonces alguien me dice que éste hombre involucionaría así no me lo habría creído. En perspectiva, las políticas defendidas por Isidoro, por aquellos años (en lenguaje de hoy, un perroflauta, filocomunista) eran mucho más radicales que lo que hoy defiende Pablo Iglesias en Podemos, y no es que lo diga yo, allí están las hemerotecas y la declaración de principios del PSOE que figura en mi carnet de militante de aquella época, firmado por su Secretario General, el compañero Felipe González Márquez, y que guardo como oro en paño:
El Partido Socialista declara que tiene por aspiración:
1. La posesión del poder político por la clase trabajadora
2. La transformación de la propiedad individual o corporativa, de los instrumentos de trabajo en propiedad colectiva, social o común, es decir de la tierra, las minas, los transportes, las fabricas, el capital-moneda, etc, etc
3. La organización de la sociedad sobre la base de la federación económica, el usufructo de los instrumentos del trabajo por las colectividades obreras, garantizando a todos sus miembros el producto total de su trabajo.
En suma: el ideal del PSOE es la completa emancipación de la clase trabajadora, es decir, la abolición de todas las clases sociales y su conversión en una sola de trabajadores (subrayado mío)
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Por supuesto que todo el mundo tiene derecho a ir adaptando su discurso y su práctica política acorde con la evolución de la sociedad y de los tiempos. Por supuesto que la sociedad española de mediados de los 70, nada tiene que ver con la sociedad actual y, por supuesto que un partido de corte marxista que hubiese propuesto la nacionalización de los instrumentos del trabajo y la desaparición de las clases sociales en los 70 no habría tenido ninguna oportunidad de llegar a gobernar y, por ello, fue un acierto transformar el viejo PSOE, en un partido socialdemócrata y pasar a formar parte de la Internacional Socialista, junto a Olof Palme, Willy Brandt, François Mitterrand, etc, etc., desarrollando políticas redistributivas, universalizando la sanidad, la educación los servicios sociales, las pensiones. Personalmente me siento orgulloso, junto con muchísima gente, por haber participado modestamente en éste proyecto, pero quienes tuvimos la suerte de estar en la gestión de éstas políticas, que transformaron la vida de millones de españoles hoy sentimos vergüenza de las declaraciones y del posicionamiento político de Isidoro. Si Olof Palme levantara la cabeza se volvería a su tumba muerto de vergüenzano nos representa.
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