Nombres de calles en Langreo
Por fin alguien con sentido común, pero, más que nada, con unos conocimientos de Historia que deberían hacer sonrojar a muchos que hablan de historia pero que a lo más que llegan y con esfuerzo es que aquí, en España, hasta hace 40 años hubo un dictador al frente de este país.
Pero, sobre todo, la que creo habría deseado que la hubiese tragado la tierra fue la señora Carmena cuando escuchó a este concejal desglosar punto por punto todas las meteduras de pata de sus ediles, dirigidos por ella, con el asesoramiento de la ahijada del mayor dictador que aún existe.
Pero, bueno, en todos los sitios "cuecen fabes" y aquí, en Langreo, a montones... y me explico.
Hace tres años que llevo solicitando que se le ponga el nombre de una calle en un polígono de Barros a un empresario que fue el símbolo de los mismos en la Cuenca y me atrevería a decir que de los mejores de Asturias, pues pocos pueden presumir de haber sido de los creadores del antiguo Banco Asturias, fundador de Talleres Merino, S. A., de Talleres Eléctricos Mey, S. L. y cooperador de otras, mediante ayudas en su creación, con cesión de terrenos y obras, aunque ello significase la competencia para su propia empresa.
En sus empresas nunca hubo ERE, sus operarios inician y acaban su vida laboral en la misma y el que por su voluntad marcha antes, acaba añorándola (y de eso doy fe).
Fue el maestro de los mejores caldereros y soldadores de Langreo, poseedor siempre de la maquinaria más avanzada, un genio en cuanto al desarrollo de útiles y pequeños inventos y un hombre que vivía por y para sus empresas.
Si a ello añadimos que de las cinco empresas que existen en este polígono de Barros, tres fueron creadas por él, no es ningún disparate que este que suscribe solicite para don Vicente Merino Luri el nombre de la calle en la que está situada su empresa, que en estos momentos no se sabe si se llama Los Llerones o la Estación.
Pues bien, como digo, llevo tres años solicitándolo, y primero, unos pusieron a media docena de calles nombres de alcaldes, políticos, sindicalistas y algún que otro que lo más que hizo fue ser un gran movilizador de masas; después, otros hicieron lo propio con los de su entorno, pero este hombre cuyo mérito en estos tiempos fue dar de comer mediante los puestos de trabajo y la formación a cientos de personas... ¿para él no hay una calle con que recordarle?
La antigua alcaldesa me animó a que siguiera insistiendo, pero ella no hizo nada, espero que la nueva junta municipal tenga un poco más de tacto y, a pesar de que era un empresario y no un líder sindical, se digne, por fin, a dar su nombre a esa calle que se solicita.
Nada más. Animo desde aquí al señor alcalde a dar un paso adelante antes de que algún otro concejal le saque los colores, como ahora lo ha hecho el de Madrid a la señora Carmena.
José Manuel Rodríguez Fernández
Tuilla (Langreo)
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