"Amoris Laetitia", el mundo la esperaba
La extensa exhortación del Papa Francisco que hace días se presentó en el Vaticano sobre la familia que se ha titulado “Amoris laetitia”, “La alegría del amor”, documento segundo de Bergoglio, tras la Evangelii Gaudium, analiza diferentes aspectos y tiene un nuevo lenguaje, documento larguísimo que ya algunos consideran catastrófico, yo no me atrevería a contradecir, sería un loco al Papa en asuntos de familias cristianas, el documento está hecho y muy de acuerdo con los tiempos que corren, pide una lectura reposada con el fin de encontrar en él, solución a la actual situación que viven las familias no solo las católicas y esto es la novedosa realidad, entrando en el mundo de manera enteramente distinta presentando caminos y propuestas para aquellas que no son tratadas como tales, las que viven en una nueva unión, las personas divorciadas, es importante hacerles ver creer y sentir que no están excomulgadas, que son parte de la iglesia y siempre integran la comunión eclesial, que las situaciones irregulares en el seno de la familia no puede nadie condenarlas para siempre,Bergoglio aparta la condición de pecadora a quien opte por volver a casarse y vivir en plenitud, no tiene que estar arrepintiéndose toda la vida d eloq ue es ya imposible arrepentirse.
El documento del Papa Francisco creo que no decepciona a nadie, recoge la preocupación por el bien de las familias en el mundo y basa la exhortación en la cercanía de Dios a la condición humana, la situación de los divorciados la valora individualmente, tema este comprometido y lo aborda en varias partes, de la eucaristía, dice el Pontífice, que no es un premio para los perfectos, sino un generoso remedio de los débiles, por ello importante que los sacerdotes acompañen en un camino de descernimiento. En las uniones de hecho, apunta nuevos desafíos para la institución familiar, deja claro que las uniones de hecho no se pueden equiparar al matrimonio. En este sentido defendió el basado en la unión de un hombre y una mujer, no puede equipararse, abierto a la comunicación de la vida nos asegura el futuro de la sociedad. Francisco, exhorta defiende que toda persona, independientemente de su tendencia secual, ha de ser respetada en su dignidad y acogida con respeto, y critica los organismos internacionales que condicionen ayudas financieras a los países pobres a la institución de leyes para el matrimonio entre personas del mismo sexo, concluye la reflexión sobre esta cuestión, en la que la iglesia debe renunciar a proponer otro ideal que no sea el que Jesús ofrece al ser humano. La exhortación hace un recorrido en cada realidad humana, la vergüenza del aborto, la falta de la figura materna, el feminismo y la ausencia paterna, las uniones en el sentimiento de la orfandad, la falta de la figura materna, la orfandad que viven hoy muchos niños y jóvenes. Reconoce Bergoglio, como legítimo, incluso deseable que las mujeres quieran estudiar, trabajar y desarrollar su capacidad y tener objetivos personales, pero no podemos ignorar la necesidad que tienen los niños de la presencia materna en especial en los primeros años.
Después de leer el larguísimo documento, no puede permanecer como mero espectador, la gratitud me obliga, he aquí la gran nueva, he aquí al Papa Francisco que acaba de cumplir tres años de pontificado con el ingente trabajo que ha hecho el acercamiento de los fieles y de la Curia, Amoris Laetitia, el mundo la esperaba.
Benigno Martínez-Fuego,
Marcenado (Siero)
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