Garantías inútiles
Desde hace unos días en las redes sociales vuela una noticia que la verdad a mí, me da un poco de miedo, por lo que con ello puede llegar a pasar, cuando realicemos una compra. La historia comienza cuando el matrimonio formado por Thomas y Denise, habitantes de precioso pueblo pesquero de Seaham al norte del Reino Unido, deciden poner una pequeña parte de sus ahorros unos mil euros, en la compra de su tan deseada televisión de 42 pulgadas, de marca Panasonic, para poder disfrutar de sus programas favoritos.
El problema en cuestión llega cuando después de un tiempo, su inversión deja de funcionar y su ilusión se va al traste, la tele no funciona, ellos tranquilos y confiando en la garantía de cinco años, que acompaña al televisor, deciden, poner en manos de la compañía la reparación de dicha avería, y aquí comienza su lucha, la compañía pone en conocimiento del matrimonio que no se hará cargo de la reparación, pues la avería de dicho producto viene por culpa de la nicotina y los culpables son el matrimonio por ser fumadores y deciden no hacerse cargo por un mal uso de su producto, increíble, lo primero que la noticia no nos da, es como la compañía sabe que ellos son fumadores, para acogerse a esa explicación, pero aun así, en la garantía no se especifica que no se puede fumar cerca del aparato. Y mi pregunta ahora es la siguiente, a partir de ahora cuando compremos un producto, para el hogar, aun con una garantía plena, y se nos estropee, nos pueden decir, que la culpa es nuestra pues en nuestra casa se fríen cosas y los gases, lo han estropeado, o bien que es por la utilización de aerosoles dentro del domicilio, o por la temperatura que tenemos dentro de nuestras casas, si tenemos mucha claridad o no, hasta por el olor corporal, creo la verdad que esta compañía se ha pasado cuatro pueblos, así que ya sabéis , garantías, y más garantías.
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