El occidente de Asturias, en fase terminal
Al Gobierno del Principado de Asturias.
Les escribe uno de los pocos empresarios o emprendedores, por llamarlo de alguna manera, que todavía persistimos en la comarca noroccidental de Asturias, pese al total abandono e inoperancia que sufrimos por parte de los sucesivos gobiernos que ha venido padeciendo el Principado de Asturias.
He de confesar que cuando decidí trasladar mi actividad profesional desde las islas Canarias a mi lugar de nacimiento (Castropol) lo hice con la idea, por desgracia equivocada, de que desde este Gobierno se habrían aprovechado las oportunidades económicas que nos fueron brindadas por el llamado "boom inmobiliario", para dar un impulso a una zona que languidecía por la despoblación y la falta de oportunidades laborales, mediante la implantación de planes de empleo viables y útiles, así como ayudas a emprendedores y personas con ansias de innovar.
Por desgracia, mi apreciación y, en general, la de la mayoría de la población de la comarca es la de que se han gastado fondos en planes de empleo inútiles, no porque no fueran necesarios, sino porque se realizaron con criterios de selección nulos, la mayoría con contenidos también nulos y orientados en su mayoría a personas que no los necesitaban, subvenciones para la rehabilitación de viviendas (el Dorado, llamado turismo rural, que nos iba a poner de nuevo en el mapa), pintorescos museos de interpretación, de utilidad más que discutible y de coste de mantenimiento más discutible todavía, etcétera, todo ello para que "cuatro listos" hayan hecho negocio a costa del dinero de todos.
Hace unas semanas se hizo público un estudio de la Universidad de Oviedo que revela que en los próximos quince años las comarcas perderán un tercio de su población y, no nos engañemos, en el caso del Noroccidente, esa población no se desplazará a Oviedo, Gijón o Avilés, sino que se marchará al vecino Ayuntamiento de Ribadeo, a un kilómetro de Asturias, un Ayuntamiento que, con la ayuda de la Xunta de Galicia y para nuestra vergüenza, lleva mucho tiempo haciendo las cosas bastante mejor que nosotros.
Dejemos de lado de una vez por todas la falsa creencia de que el occidente de Asturias podrá subsistir a base de acoger a turistas durante un mes al año. Nuestra comarca necesita urgentemente que densifiquemos el tejido empresarial, que desde este Gobierno, en colaboración con las corporaciones municipales, se busquen e incentiven el establecimiento y la consolidación de nuevos negocios, industria y servicios.
Por ello, y antes de que ustedes vuelvan a dilapidar nuestro dinero en potenciar exclusivamente negocios en su mayoría estacionales, como son la hostelería o el turismo rural, les agradecería que estudiaran otras alternativas, que no esperen a las próximas elecciones, que vengan y se reúnan con los que todavía, día tras día, realizamos el acto de fe de mantener nuestros negocios abiertos, con cero subvenciones, cero ayudas, cero facilidades y cero interés por su parte, mírense en el espejo de la Xunta de Galicia, en el cual queda bien reflejada cuál es la política a seguir si pretendemos que en pocos años las comarcas no se conviertan en un páramo desolado. Por favor, dejen de intentar inventar la pólvora, sólo copien de los que saben y, en este caso, lamento decirles que la Xunta de Galicia sabe bastante más que ustedes de planes de dinamización de las zonas rurales.
Sólo recordarles una cosa. El día que faltemos nosotros, sobrarán ustedes.
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