¿Por España o por usted, Señor Rajoy?
Si por el bien de España hay que hacer concesiones, Señor Rajoy, ¿por qué no empieza por usted mismo? Quizá si usted se fuera y dejara a otro en su lugar, el PSOE también estaría dispuesto a realizar un esfuerzo de entendimiento con otra persona del PP que no sea usted. Ciudadanos no es problema, es cosa fácil de convencer, su palabra tiene menos consistencia que su compromiso para con quienes le dieron su voto en un programa que luego es papel mojado.
Señor Rajoy, puede apelar a los votos, a que fue la lista más votada, pero eso no le exime de los errores, incapacidades y delitos en los que durante su mandato ha incurrido el PP por toda la geografía nacional, incluyendo su sede central de Génova.
Es mentira eso de por España. A usted le corre prisa ser investido por usted. Teme que si entran otros a gobernar, les den más capacidad e independencia a jueces, fiscales y tribunales de Justicia, y entonces se animen a imputar a los dirigentes, y no a la paloma, gaviota o charrán del logotipo PP, algo que no se puede comprender bajo ningún prisma racional, ya que las siglas, partidos y asociaciones no delinquen, sino quienes las dirigen.
Cuando Ciudadanos y PSOE llegaron a ese acuerdo, ustedes no les apoyaron por ese bien de España. Ahora reclama esa responsabilidad a los demás. Señor Rajoy, creo que España no se merece dirigentes como usted, y quizá como los de los demás partidos. No consiguen entenderse, no logran pactar, no saben dialogar ni siquiera por la responsabilidad y seriedad que requiere el momento actual. Es cierto que no es bueno no tener un Gobierno adecuado y conformado, pero mejor unas terceras elecciones que padecerlo otros cuatro años a usted, Señor Rajoy.
Los demás dirigentes tampoco irradian personalidad y capacidad de convencimiento alguno. Ciudadanos dice no, pero todos sabemos que se convertirá en sí en menos que canta un gallo. Otros dicen no, pero, a mi entender, debieran decir según cómo y qué.
Me refiero al PSOE. Pongan sus propuestas sobre la mesa, ya que tanto el PP como su equipo alevín (Ciudadanos) les reclaman como esenciales, por ejemplo, que no esté Rajoy, abolir la reforma laboral, ley de educación, "ley mordaza", renta mínima, etcétera. Todo esto y más podrían conseguirlo, y si es rechazado, ya tendrían una justificación para ese no. Podemos está en otra onda, ya que no le quieren de socio ni ustedes, amigos socialistas. Creo que no le quieren porque propone eliminar muchas prebendas de las que ustedes disfrutan en perjuicio de un gasto enorme que lastra el cuadrar el déficit.
Señores del PSOE, si dicen no al PP, cosa entendible, y no están dispuestos a pactar con las demás fuerzas políticas, están siendo un obstáculo para el buen funcionamiento de nuestro sistema democrático. Pactar es eso, saber ceder y encontrar puntos de acuerdo en todos aquellos que beneficien a los ciudadanos que esperan como agua de mayo esas resoluciones (así que no me sean egoístas), desechar los puntos imposibles y, en los demás puntos, negociar hasta compendiarse.
No veo ninguna dificultad mas allá de los egoísmos propios a que Ciudadanos-PSOE y Unidos Podemos puedan buscar un entendimiento, si aparcan sus líneas rojas y se dedican a los puntos que tienen en común, algo que ya pusieron en práctica en el anterior pacto PSOE y Ciudadanos.
Debe rellenar todos los datos obligatorios solicitados en el formulario. Las cartas deberán tener una extensión equivalente a un folio a doble espacio y podrán ser publicadas tanto en la edición impresa como en la digital.
Las cartas a esta sección deberán remitirse mecanografiadas, con una extensión aconsejada de un folio a doble espacio y acompañadas de nombre y apellidos, dirección, fotocopia del DNI y número de teléfono de la persona o personas que la firman a la siguiente dirección:
Calvo Sotelo, 7, 33007 Oviedo