Impuesto eléctrico
La verdad es que no me había fijado en la factura de la luz con detenimiento hasta el otro día, cuando mirando el desglose del dinero cobrado veo una cantidad en concepto de Impuesto Eléctrico. Esta cantidad obedecía al resultado de aplicar este impuesto (el 4,864% nada más y nada menos) al total del dinero cobrado por los kilovatios consumidos, a lo que hay que aplicar, además, el IVA correspondiente; lo que quiere decir que a mayor consumo, más cantidad a pagar, como es lógico. Digo lógico por el resultante de la operación y no porque sea razonable que quien consuma más electricidad pague más en cuestión de impuestos.
Entrados en el siglo XXI resulta, cuando menos, absurdo pensar que la electricidad es un lujo. ¿Alguien concibe una vivienda sin electricidad? Las personas que, además, tenemos calefacción eléctrica pagamos unas facturas importantes y como el impuesto en cuestión se aplica sobre la cuantía total nos podría suponer unos 40 o 50 euros anuales que, insisto, para tratarse de un producto indispensable me parece abusivo.
Los impuestos son necesarios, pero han de aplicarse con equidad y raciocinio. Que quien más tenga pague más, sí, pero en este caso, quien más consume no tiene por qué pagar más en impuestos, ya que se trata de un bien necesario.
Gustavo Adolfo Álvarez González
Mieres
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