Osos, lobos y jabalíes o nuestra seguridad y tranquilidad
Nuestra administración debe empezar ¡ya!, es urgente, a resolver y encontrar el equilibrio de nuestro ecosistema. Elegir entre las personas, o dejar que los animalistas sigan marcando la ruta a seguir, que no es otra que sus propios intereses y distraimientos domingueros, que se contraponen a nuestra seguridad y tranquilidad. Deben dejar claro que las personas están por encima de cualquier derecho animal. No permitir que los defensores de Osos, Lobos y jabalíes, consigan y ustedes consientan, que se propaguen y expandan causando daños y temor a los ciudadanos.
Ese equilibrio se perdió al faltar una administración firme que afronte este tema, hay que erradicar de inmediato todas esas plagas de animales salvajes que atemorizan a los vecinos de los pueblos: Este día vimos en la TPA cómo en Baduxu (Proaza) los vecinos estaban atemorizados de cómo el oso campa alrededor de sus casas, comiéndose las frutas, destrozando colmenas, huertos y hasta una cuadra donde mataron a un burro que estaba muy tranquilo dentro. ¡Eso no puede seguir ocurriendo! Hay que eliminar ese oso de inmediato, o será él oso quien en vez de burro elija un buen día hacerlo con una persona. Cómo podemos apreciar los que llevamos años denunciando que esta posibilidad sería real, ya la tenemos, y los políticos siguen impasibles ¿pero cómo es posible, no ven el miedo en sus caras, ancianos que llevan toda la vida viviendo allí, y ahora sienten miedo de estar en sus propias viviendas y propiedades?
Le preguntan a un responsable de la casa del oso, a que se debe ese acercamiento y comportamiento, y dice que en esta época del año les falta comida arriba y bajan donde la hay en los pueblos, que cuando llegue el otoño subirán unos metros más arriba en busca de las castañas y bellotas; curiosa respuesta verdad de un individuo que vive de esto. Las castañas y bellotas también son de las personas de los pueblos, en verano hay que dejarles las cerezas, arándanos y demás frutos; en otoño las castañas y bellotas y el resto del año la miel, los animales domésticos y sin tardar si les da por ahí, les dejamos los entretenerse con nuestros niños ¿Por qué no se comen entre ellos, o a los jabalíes y lobos que sobran en cantidades no escritas?
Este no es un tema baladí, en los pueblos y ahora también dentro de las ciudades y nuestras carreteras estos bichos salvajes están poniendo en serio riesgo la vida de personas, no pueden seguir alterando la vida de las gentes de este modo, hay que reducir su número y si fuera preciso exterminarlos.
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