Rosa Díez y el Parlamento Europeo
No es la primera vez que iniciativas de la Sra. Rosa Díez me provocan, no tengo ninguna fobia, pero sí alguna filia, con dicha señora, pues de alguna manera conozco su paso por el Gobierno Vasco donde dio más de un buen ejemplo.
Sin embargo entiendo que está en una fuga hacia delante que no sé a donde puede conducir, pues entendiendo que es una señora políticamente muy culta, su última proposición de buscar que institucionalmente se ilegalice a ANV, me recuerda cierto poema de Martín Niemöller (erróneamente atribuido a Bertolt Brecht), sacerdote alemán, que decía: Cuando los nazis vinieron a llevarse a los comunistas, guardé silencio.
Sin embargo el PSOE plantea mociones para romper los pactos que han permitido a ANV estar en determinados municipios. Este planteamiento, con el que estoy de acuerdo, supone la participación ciudadana y de sus representantes en la resolución de un conflicto, no en su solución desde arriba, en definitiva, intentar evitar la actualización de dicho poema.
A la vez mañana se plantea en el Parlamento Europeo el tema de las 65 horas semanales de trabajo, lo que está provocando un montón de debates de toda naturaleza, fundamentalmente radiofónicos, a favor o en contra de la medida, viendo por primera vez como el PSOE se manifiesta en contra, por lo cual los felicito, olvidándose de su anterior participación en el Parlamento Europeo, con motivo de la Directiva Bolkestein, antesala de esta medida.
Posiblemente este cambio sea producto de la crisis que padecemos, porque facilitar que las empresas (que no los empresarios) necesiten marcos de liberalización de su actividad económica para lo que pueda ser una justificada acumulación de capital, cuando ésta se dedica a una mejora del aparato productivo, puede ser entendible. Pero lo que no es entendible es que se haya acumulado capital para trasladarlo especulativamente a otros escenarios cayendo en el timo de la estampita.
Sin embargo, en todo este proceso, los que producimos esta acumulación de capital sólo tenemos como pago trabajar más, viendo cómo se reducen los impuestos a los que más acumulan capital con el que juegan a la lotería y cuando pierden piden auxilio a un Estado en el que no creen. Estado que financiamos todos con nuestros impuestos.
Pues bien, la señora Rosa Díez debería manifestarse en todos los temas, no solo en el problema vasco, ya que es una diputada del Estado y representa, o debería de representar, a todos los españoles y en todos los temas, que son muchos y más graves que el problema vasco.
Quiero acabar completando el verso de Niemöller: porque soy comunista no me callo.
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