Nuevos tiempos
Para todos aquellos que puedan estar interesados en temas sobre cristianismo, hay que decir que en los tiempos actuales los nuevos movimientos cristianos arrancan con fuerza. Hoy en día se conocen de varios tipos, y la Iglesia católica no tiene tanto poder como antes. El poder es un problema, yo creo, y siempre consideré que hay que ir transformando a las personas desde el nivel de individuo hasta el nivel familiar, luego el clan, la sociedad y, por último, la nación.
Según pienso, el cambio ha de ser constante y paulatino. Para asumir el cambio es necesario un buen objetivo.
Yo estoy en contacto con diversos grupos cristianos, por ejemplo, la comunidad franciscana seglar, los testigos de Jehová (un saludo desde aquí para mi amiga Antonia así como a su marido, Jovino y su familia, excelentes personas que predican un cristianismo de nuevo cuño, los testigos de Jehová), esto en la actualidad; también celebré y celebro como miembro de los seguidores de Sun Myung Moon al que tengo en buena estima, y creo que a mí me tienen en buena consideración en su Iglesia, donde conocí a varios chicos que desarrollan diversas actividades, entre ellas el "foundraising" o recaudación de fondos para diversas actuaciones; esto se hace a base de vender detalles por pequeños comercios, bares y cafeterías. Así se obtienen los fondos para las diversas actividades que se llevan a cabo. Entre otras cosas, también dábamos testimonio a la gente, trabajando en equipo también con chicas japonesas con las que conviví: se recuerdan con cariño. Se aprende siempre de las actividades efectuadas. Puedo decir con satisfacción que conocí a ese hombre, un buen hombre sin duda, que seguro dará qué hablar. Fue una buena experiencia de aprendizaje y sabiduría que muchos compartimos.
Yo conocí en Barcelona el centro, pero actualmente desconozco la ubicación del mismo. Fue allá por el noventa y tantos. De hecho, doné algún libro. Para mí, la fe, la solidaridad, la creencia en un ser superior es importante para desarrollar la actividad diaria. Es curioso que desde que conocí el grupo hubo desgracias en el entorno, cosas tremendas.
Actualmente, colaboro con una fraternidad franciscana, un poco desde fuera, y desde aquí mando un saludo a don Fernando, colaborando siempre como uno más y en la medida de mis posibilidades. Todo sea por mejorar a la persona y la sociedad. Un saludo para Dani y su mujer. Y también para aquellos que creen en los valores familiares, entre los que me incluyo; como franciscano seglar, tengo que decir que también allí aprendí lo que es el amor.
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