Yo pediría un minuto de silencio

Yo pediría un minuto de silencio por esos niños en un hospital de neonatos en Siria. Por esas familias que intentan salir del horror de la guerra y se suben en una barca hinchable sin saber cuál será su destino. Por esas personas que se juegan la vida por salvar a los anteriores y procurar que sus vidas sean un poco mejor. Por los que se quitan la vida por no poder pagar sus hipotecas y ni ser capaces de mirar como sus hijos son desahuciados. Por esos ancianos que no tienen familia ni posibles económicos y se iluminan sus noches con velas aunque eso les cueste la vida.

Pero la verdad, señores del PP. PSOE, Compromis y etc....no hagan demagogia con el minuto de Rita Barbera. Todo mi respeto a su familia como ser humano a la que nunca le hubiera deseado la muerte, ¿pero un minuto de respeto? ¿El que ella dedico a las víctimas del metro de valencia? ¿A los ciudadanos de valencia a los que empobreció con sus facturas a empresarios que financiaron a su partido para ser elegido?

No recuerdo haberle visto tan indignado el día que el Sr. Posada, siendo presidente del Congreso de los Diputados, pidió también un minuto de silencio para el gran Pedro Zerolo sin la presencia de ninguno de los miembros del Gobierno en sus sillones azules. ¿Y el minuto de silencio por el gran Labordeta dónde se quedó?

No recuerdo haber visto u oído hacer un minuto de silencio por las personas que se están muriendo de pena e impotencia porque les robaron sus ahorros y la justicia y el Gobierno no les hacen ni puñetero caso. Me refiero a los preferentistas estafados por unos banqueros desalmados y ladrones.

Cuando este Rafael Hernando se refiere a ciertos medios de comunicación que se ensañaron con Rita Barbera me imagino que no serían esos medios que cuando Monedero tuvo el problema con Hacienda nos bombardearon día y noche con la noticia y le perseguían hasta en la salida de clase o de su casa, o con el famoso tuit de Zapata, que lo han juzgado hasta en tres ocasiones o con encarcelar a los titiriteros por hacer teatro en la calle queriéndoles aplicar la ley antiterrorista, o a los señores Chaves y Griñan que aunque dimitieron de sus cargos y no han cometido ningún acto de corrupción, sino por haber gestionado mal las ayudas a empresas y trabajadores con los famosos ERES. Me imagino que se referirá a esos medios de comunicación que no son los palmeros del PP, pues mire Sr. Hernando, la libertad de prensa y opinión es eso, unas veces te gusta lo que dice y hace y otras no, nunca se escribe e informa a tu gusto.

Por otro lado, mucha lágrima de cocodrilo, mucha cara de circunstancias, como si se les hubiese muerto una compañera de partido querida, pero acusando de su fallecimiento a los periodistas y de los adversarios políticos, que la sometieron a una cacería, a una persecución implacable, pero tanto unos como otros se condujeron como había que hacerlo, de acuerdo con las condiciones de cada uno: Los periodistas a hacer su trabajo, informar a la opinión pública, su deber democrático. Los otros, los adversarios políticos, a manifestarse de acuerdo a la información recibida, incluida a la que se deslizaba de los tribunales y las investigaciones de la Fiscalía y la Policía/Guardia Civil, y actuar en consecuencia en las instituciones. Se tenía una opinión de las circunstancias que rodeaban a Rita Barbera y se seguirá teniendo. ¿Qué otra cosa se puede hacer? ¿Blanquear la corrupción del PP, acaso? ¿Se han agotado todas las responsabilidades pasadas del PP con la muerte de Rita Barbera? Pues NO.

Yo a Rita no la voy a elogiar. Lo que sí elogio es la capacidad del PP para hacer política incluso de sus muertos. O mejor dicho, con los muertos de "los que usted me habla". No han tardado nada en montar un pollo con lo del minuto de silencio, en el que los diputados de Unidos Podemos se han ausentado.

El PP miente a sabiendas que el pueblo lo sabe y eso es el declive de una nación cuando una masa ignorante o favorecida por la corrupción del mismo o por puestos de trabajo le sigan votando y sigue siendo el partido más votado. Ten democracia para oír las sandeces y la basura que su portavoz ha lanzado por la boca a los medios, por el tema de Rita Barbera, sin ni siquiera tener la decencia de escucharse en la hemeroteca, es de tal bajeza su vomitiva actuación que es muy difícil digerirlo. Si ante declaraciones semejantes el campo político no es capaz de expulsar a semejantes individuos de la política Española es que en las instituciones no hay más que depredadores en busca de fortuna económica.

La miseria humana no se encuentra en la libertad de no participar en un homenaje político realizado en el Congreso, sino en la utilización de la fallecida con fines partidistas al estilo si te he visto no me acuerdo pero ahora te elevo a los cielos. España es un país singular: si te mueres, eres lo mejor, aunque no lo hayas sido nunca. El peligro de esto es que parece que además puede haber reflexiones legales para evitar que en el futuro los que no han sido buenos lo parezcan en vida.

¿Conciencia? Buscar el máximo rédito político. Eso es lo que busca el PP. Si alguien de Podemos acusara a la prensa como ha hecho Celia Villalobos de "matar a Rita Barbera" se produciría un tsunami en España.