Calvo Sotelo
Ayer Calvo Sotelo, hoy La Gesta, mañana quién sabe. Por LA NUEVA ESPAÑA me entero que a la avenida de Calvo Sotelo le retirarán la placa con su nombre. ¡Qué disgusto se va a llevar, esté donde esté!, espero que gozando más que en la España que dejó en 1936. No sé el motivo, quizá por ser un buen católico, padre de familia, escritor y trabajador infatigable para subvenir a las necesidades de la familia y pagar sus estudios, quizá por haber obtenido premio extraordinario en la licenciatura y doctorado y número uno en las oposiciones de abogado del Estado; ministro de Hacienda y claro jefe de la oposición tras el triunfo electoral de las izquierdas en febrero de 1936. Fue secuestrado y asesinado por las fuerzas del orden. No se puede uno imaginar que esta misma barbaridad se realizara en la actualidad y que más tarde, pasados los años, le quitaran la placa a una calle dedicada a su memoria, pues eso mismo pretende el tripartito que gobierna nuestro Ayuntamiento: socialistas, Podemos e IU. Yo creo que es porque no saben hacer otra cosa. Pero esta idea descabellada no es la única, hay muchas ocurrencias, según se levanten, la principal el boicot a unos emblemáticos premios "Príncipe de Asturias", buque insignia de Asturias por el mundo, y su desprecio a la monarquía española y, como complemento, la ocupación del Ayuntamiento por los manifestantes. Siguen, la esterilización de las jabalinas, los pasos cebras y árboles de colorines, el cierre del Asturcón y todo lo que suene a élite. El interés por reabrir viejas heridas que parecían olvidadas.
Los desplantes a la Iglesia católica: el traslado del Nacimiento emplazado tradicionalmente en la plaza de la Catedral y su sustitución por la carpa de una pista de patinaje, ejemplo de mal gusto con el entorno arquitectónico; la oposición y supresión de las ayudas a las procesiones de Semana Santa. ¡Ah!, se me olvidaba, el gran recibimiento a un representante de la Teología de la Liberación, cómo no; la inclusión de actos culturales, algunas zarzuelas, por ejemplo, que fueron mofa y burla a los sentimientos de los católicos; parece como si estuviéramos en el preámbulo de la Revolución Francesa olvidándose que el cristianismo fue el origen y eje de Europa.
Y mientras, se ignoran los verdaderos problemas de Oviedo o se reconoce la incapacidad de resolverlos: la potenciación de Oviedo como sede de congresos, la congestión de tráfico en las autopistas de acceso a la ciudad, colapsados muchas veces; una mayor ayuda y formación a los más desfavorecidos, no la han notado; los comedores de verano para los niños, un bluf; dónde están las promesas electorales. La resolución de entramados urbanísticos importantes, el área del Cristo, antiguo Hospital Central, la zona de la antigua Fábrica de la Vega, no se ha avanzado nada; la desaparición de los alcaldes de barrio, nexo de unión del ciudadano con los órganos de decisión, error mayúsculo; desbroce y limpieza de caminos y sendas muchas intransitables o cerradas, inactividad total. Y del tema de la baja natalidad, suicidio demográfico de España, crisis que convertirá Oviedo en ciudad fantasma, ni mentarlo.
Son muchos asuntos donde clavar los dientes. Espero y deseo que en los años que restan de gobierno tengan más éxito en su misión que agradeceremos todos.
Debe rellenar todos los datos obligatorios solicitados en el formulario. Las cartas deberán tener una extensión equivalente a un folio a doble espacio y podrán ser publicadas tanto en la edición impresa como en la digital.
Las cartas a esta sección deberán remitirse mecanografiadas, con una extensión aconsejada de un folio a doble espacio y acompañadas de nombre y apellidos, dirección, fotocopia del DNI y número de teléfono de la persona o personas que la firman a la siguiente dirección:
Calvo Sotelo, 7, 33007 Oviedo