El precio de la mentira
Hace poco más de un mes, los medios de comunicación difundían una noticia sobre la detención de un hombre que, presuntamente, había llevado a cabo el rapto de su expareja llegando a echarle pegamento en la vagina. Pasados unos días, la cuestión daba un giro de 180 grados al quedar en libertad el hombre y detenida la mujer, pues al parecer todo había sido fruto de un secuestro simulado. Esta mañana, escuchaba en la radio que un padre confirmaba haber mentido y exagerado cuando solicitaba ayuda económica destinada a una hija con una enfermedad genética, llevando a la niña a curanderos en vez de ponerla en manos médicos en Estados Unidos. Siendo estas conductas reprobables y causantes de indignación, no dejan de ser acciones aisladas, sin conexión o confabulación de asociaciones y colectivos, tal como sí ha sucedido en el ámbito político e institucional, donde las tramas de corrupción llegaron a brotar como las setas. Ahora bien, si tanto la mujer que puso la denuncia falsa como el progenitor que engañó a la ciudadanía han ocasionado un roto en su credibilidad difícil de remendar, en política es compatible mentir y triunfar.
Debe rellenar todos los datos obligatorios solicitados en el formulario. Las cartas deberán tener una extensión equivalente a un folio a doble espacio y podrán ser publicadas tanto en la edición impresa como en la digital.
Las cartas a esta sección deberán remitirse mecanografiadas, con una extensión aconsejada de un folio a doble espacio y acompañadas de nombre y apellidos, dirección, fotocopia del DNI y número de teléfono de la persona o personas que la firman a la siguiente dirección:
Calvo Sotelo, 7, 33007 Oviedo

