Por favor, un poco de humanidad
La labor de los profesionales de la salud cuenta con toda mi admiración y máximo reconocimiento, pero me sorprende que muchas veces ese trabajo encomiable que realizan no vaya acompañado de las buenas maneras y la amabilidad necesarias cuando alguien está ingresado en un hospital preocupado e indefenso. El trato que recibimos mi padre, operado dos veces de un aneurisma en la aorta abdominal, mi familia y yo por parte de algunos miembros del personal del Hospital Universitario Central de Asturias (HUCA) fue bastante frío e incluso parecía que les molestaba que les hiciéramos preguntas. A continuación pueden leer algunas de las frases que tuvimos que escuchar:
- Aquí tiene que atenerse usted a las normas del hospital. Y si quiere levantarse cuando le apetezca váyase a la Clínica de Navarra.
- Señora, yo se lo estoy explicando y creo que usted no está entendiendo nada.
- Señora, si hubiera creído que era mejor no operarlo, no me habría gastado 15.000 euros y empleado una tarde de duro trabajo.
Señoras y señores, la sanidad pública la pagamos todos con nuestros impuestos y tenemos derecho a exigir como en un centro privado, sobre todo porque lo que pedimos no cuesta dinero: empatía, educación y un poco de humanidad. Pero nada de eso se aprende en la universidad.
Debe rellenar todos los datos obligatorios solicitados en el formulario. Las cartas deberán tener una extensión equivalente a un folio a doble espacio y podrán ser publicadas tanto en la edición impresa como en la digital.
Las cartas a esta sección deberán remitirse mecanografiadas, con una extensión aconsejada de un folio a doble espacio y acompañadas de nombre y apellidos, dirección, fotocopia del DNI y número de teléfono de la persona o personas que la firman a la siguiente dirección:
Calvo Sotelo, 7, 33007 Oviedo