Por el bien de la sanidad pública
Como usuario de la sanidad pública de nuestro país y, afortunadamente, bien atendido en las veces que por circunstancias ajenas a mi intención hago e hice uso de la sanidad pública en general, quiero desde estas líneas dar las gracias al personal que en sus momentos me atendieron, en diferentes fases de mi vida.
Y desde mi humilde experiencia les doy mis más cordiales gracias a las personas que en su momento me atendieron. No obstante, quiero hacer llegar mi “digamos sorpresa” al ver que pese a los años transcurridos no terminan de dar con una solución razonada para encauzar los problemas de asistencia personal y funcionamiento en general de la estructura sanitaria, que se siguen cerrando servicios en los hospitales, hace prácticamente dos días nos echábamos las manos a la cabeza porque los profesionales que salían de las facultades no tenían sitio para trabajar en España y nos hacíamos cruces ante tal despropósito. ¿Ya colocaron a todas/os los profesionales? En la sanidad pública, ¿en dónde están?, todos emigraron, basta de tanta manipulación y falsedad por parte de todos, por favor, y decencia: políticos, profesionales, sindicatos vividores, etcétera.
Recordar que el enfermo, por desgracia para él o ella, lo somos los 365 días del año, y que todos tenemos unas responsabilidades por igual: la suya, señoras/es, es atender y cuidar de la población lo mejor posible de este país; la nuestra, trabajar y aportar lo necesario para que ello sea posible, un servidor lleva en activo pagando a la Seguridad Social cuarenta y ocho años y para seguir, ya que la salud me lo permite.
Pero ustedes, “dirigentes” y “oposición”, parece que no les preocupa mucho esto de verdad, arreglen este desaguisado, por favor, la gente se muere y para ahí vamos todos, no quisiera reconocer lo que en épocas pasadas se decía: sabemos todos los derechos y nuestras responsabilidades las solemos obviar por desgracia para el paciente con mucha frecuencia.
Si no hay profesionales en España, tráiganlos pero no nos tomen el pelo entre todos como por desgracia está pasando.
Felices Fiestas y Próspero Año Nuevo
Cesáreo Suárez González,
Oviedo
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