Mear en grupo
Es algo muy extendido en España tanto entre hombres como en mujeres. Entiendo que debe ser herencia de la posguerra, y del hacinamiento de las viviendas de esos tiempos. Las viviendas con dos cuartos de baños empezaron a llegar a los ciudadanos a mediados de los años ochenta, hasta entonces los pisos no tenían más que uno, de ahí esa costumbre.
Lo que yo no creía, era que veinte años más tarde, se pudieran pasar nuestros parlamentarios toda una tarde hablando cuartos de baño y de urinarios. Inocente de mí, creía que estaba ampliamente superada esa parte de nuestra historia. Nunca me compro perfumes, o me los regalan o me los compra mi mujer, pero en cualquier caso cuando me los trae a casa me dice: a ver si te gusta esta colonia o como mucho este perfume. Ahí es donde me doy cuenta de que pertenezco al pueblo llano. El martes 16, sus señorías, en su espeso e interesante debate hablaban de la emisión de fragancias. Yo esa palabra sólo la he escuchado en los anuncios navideños y en el Congreso de los Diputados.
No sé cuánto dinero se han gastado en la tan cacareada reforma, pero en todo caso es mucho mas lo que se han gastado en hablar sobre ello y en tirarse m a la cara (muy a propósito). Cuando tienes una reunión de trabajo, eso es lo que debería ser el Congreso, y no avanzas, en realidad retrocedes, y el martes se retrocedió. Esa es la clase política que tenemos, como no quieren o no pueden afrontar los problemas reales se dedican a pasar el tiempo hablando de banalidades que en poco o en nada afectan al día a día de los ciudadanos.
Andrés Villa García, UPyD (Unión Progreso y Democracia)
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