El calendario
Circuló hace días por algunos medios de comunicación la noticia de que la unidad de igualdad de la Universidad de Granada había publicado un calendario cuyo interés residía en feminizar el nombre de cada mes posponiéndole la vocal "a", sin atender a más consideraciones. Las fotografías de cada hoja son las ganadoras del certamen "Yes, woman can", y en inglés, porque los responsables del parto no encontraron en el diccionario palabras castellanas lo suficientemente contundentes para dejar sentado de una vez por todas que "La mujer sí puede".
Los inspiradores del invento sin duda confundieron gimnasia con magnesia o, como diría C. J. Cela, el culo con las témporas: no toda terminación en "a" es marca de género femenino (Bautista, Borja, clima, mapa, fantasma, profeta, poeta, programa…), ni toda terminación en "o" garantiza que la palabra sea masculina (Charo –familiar– , soprano, mano, radio, moto, foto, nao…). De los doce meses del calendario Juliano, que en un principio eran diez, cuatro pertenecen a la mitología: Enero está dedicado a Jano, el de las dos caras, el que abría el año, el que dio el nombre a la capital de Brasil y el que bautizó a los Genaros. Marzo recuerda a Marte, dios de la guerra. Mayo, a pesar de su terminación en "o", era el dominio de la diosa Maya. Junio es el mes de la diosa Juno, que también termina en "o". En el calendario hay también dos epónimos: "Julio" y "Agosto". El primero, "Lulio", en recuerdo de Julio César, asesinado en los idus de marzo del año 44 a. de C. Agosto se llamó así cuando Octavio, sobrino nieto e hijo adoptivo de César, fue proclamado "Augusto", es decir, "magnífico", "majestuoso", "divino". Desde septiembre hasta diciembre, los nombres no indican más que un número de orden del calendario de los diez meses: septiembre, el séptimo; octubre, el octavo; noviembre, el noveno, y diciembre, el décimo. Cuando se añadieron enero y febrero, estos meses avanzaron dos puestos, pero no cambiaron el nombre. Así llegaron hasta nosotros: septiembre es el noveno; octubre, el décimo; noviembre, el undécimo, y diciembre, el duodécimo. Como puede verse, ni uno solo, incluidos febrero y abril, muestra género alguno de discriminación. Se mantuvieron neutrales, como era su deber. No pueden ser acusados de herir sensibilidades.
Pues a pesar de su neutralidad, la Universidad de Granada se puso manos a la obra. Resultado: en adelante, "calendario" y su séquito tuvieron que aceptar una "a" que no estaba en sus planes: "Calendaria": enera o janeira, marza, junia, julia, agosta y lo mismo los que faltan. Si los meses, con sus respetables nombres, tuvieron que pasar bajo las Horcas Caudinas de semejante humillación, a los días de la semana podría sucederles lo mismo: lunesa, martesa, mercolesa, juevesa, viernesa, sábada y dominga, cuya armonía no puede negarse. Pero se libraron por falta de quórum (o de "quarum"): son sólo siete y no compensa. Los del mes se salvaron de la quema por exceso: son entre 28 y 31, demasiados. Tampoco compensa.
Ante esta situación, habrá protestas: a ver por qué, en su tiempo, no se dejaron, en los dos cursos comunes, unas horas libres para rellenarlas cuando se presentaran las "Calendarias" y su comitiva con la "a" a cuestas, porque se sabía que, tarde o temprano, iban a hacer acto de presencia. Y ahí están. Lo grave es que actividad tan lúdica e imaginativa no procede de ningún cerebro perdido por los cerros de Úbeda, que caen por allí cerca, sino de una Universidad donde se supone que se enseña en serio.
A veces se leen comentarios como éste: "Las universidades españolas pierden fuelle en el ranking internacional". Y, mientras, nosotros, aquí, jugando a la "a". Tiene bemoles.
José A. de Lillo Cuadrado Moreda (Asturias)
Debe rellenar todos los datos obligatorios solicitados en el formulario. Las cartas deberán tener una extensión equivalente a un folio a doble espacio y podrán ser publicadas tanto en la edición impresa como en la digital.
Las cartas a esta sección deberán remitirse mecanografiadas, con una extensión aconsejada de un folio a doble espacio y acompañadas de nombre y apellidos, dirección, fotocopia del DNI y número de teléfono de la persona o personas que la firman a la siguiente dirección:
Calvo Sotelo, 7, 33007 Oviedo