Basta de recortes
Desde pequeña me inculcaron valores, el esfuerzo y el sacrificio dará sus frutos y tendrás tu recompensa. Por eso cuando pensé qué hacer con mi vida decidí opositar. La vida de opositor no es fácil, la mayoría de la gente lo sabe, aunque algunos piensen lo contrario, no entramos por enchufes. Tanto tiempo estudiando, haciendo cursos, formándome para aprobar. Y lo conseguí.
Conseguí un trabajo que me gustaba, que me satisfacía, que me llenaba. Y seguí estudiando, seguí aprendiendo porque me gustaba y porque quería entender dónde y con quién trabajaba.
Soy auxiliar educador en un colegio público y atiendo a niños con necesidades especiales. Me formé y me sigo formando para atender bien a mis niños. Lo hago en horario laboral pero también en mis ratos libres. Mi recompensa es la sonrisa de mis niños. Y hasta ahora me sentía valorada por la Administración.
Pero en todos los cuentos de hadas, de esos que les cuento a mis peques en días malos, llegó el Ogro y decidió que su olla de oro estaba poco llena, que necesita más. Y qué se le ocurrió, recortar la jornada laboral a los trabajadores fisioterapeutas y auxiliares como yo. Y esto qué implica, ya no vamos a hablar del perjuicio que esto acarrea a los niños porque seguiremos haciendo todo lo posible por ellos. ¿Pero qué pasará con todo el trabajo que hasta ahora realizábamos en esta jornada no lectiva? ¿Quién lo hará? ¿Quedará sin hacer?
Me recortaran un 20% de mi jornada laboral porque para ellos todo el trabajo que hacemos cuando los nenes no están en el cole no cuenta, informes, reuniones, cursos. Y pretenden que del 15 de julio al 1 de septiembre no tengamos contrato, pero para no contar como persona desempleada nos hacen el inmenso favor de prorratearnos el sueldo de todo el año para cobrar ese mes y medio. Y dado que ese mes y medio no trabajo, tampoco cotizo por ese mes y medio. Y me reitero que mes y medio no parece nada, pero en cómputo puede suponer el jubilarse o no.
Esto me hace pensar, a mí y a muchos de mis compañeros, en con todo el dolor de mi corazón abandonar esta profesión que tanto me gusta y por la que tanto me formé, porque con 600 euros al mes y sin poder trabajar en otra cosa no podré mantener mi hogar. Eso se reflejará en los peques, personal menos preparado ocupará nuestras plazas, seamos sinceros pudiendo trabajar en jornada completa cobrando el doble quién se quedará allí. Luego miras las noticias y vemos al señor Genaro preocupándose por la inclusión de los niños en los coles.
¿Será otra gran idea de nuestros gobernantes para privatizar un servicio del que sólo pertenecemos 170 personas repartidas por toda Asturias? ¿Esta es la política de empleo que ofertan nuestros gobernantes? ¿Estos puestos de minijobs son los que quieren para nosotros? ¿Estos contratos son los que nos proporciona un partido que se hace llamar Obrero?
¿Cómo les voy a inculcar el esfuerzo y la superación a mis niños si yo me siento como si todo lo que he trabajado no me sirve para nada?
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