Una vieja polémica sobre el Picu Urriellu
La polémica o discusión bizantina que aquí vamos a recordar tuvo lugar allá por el año 1970 y fue motivada cuando Lastra y Arrabal hicieron la escalada invernal (una semana colgados en la pared del Picu, atrapados por una gran tormenta de viento y hielo que imposibilitó su rescate y que le costó la vida a Arrabal), verdaderamente trágica y dramática.
Pues bien, en la prensa nacional, con excepción de la asturiana, se montó una polémica, que podemos calificar de tontorrona y absurda, entre unos periódicos y otros. Al informar sobre la dramática aventura de Arrabal y mi amigo Lastra, unos se referían al Urriellu como Naranjo de Bulnes y otros como Naranco de Bulnes. Fue tremenda la polémica, fruto de una ignorancia supina sobre el verdadero nombre de nuestra cumbre mítica, que no es ni Naranjo ni Naranco, éste último en Oviedo, y no en Picos de Europa.
Una vez más, aquí diremos que nuestra cumbre asturiana no tiene más nombre que el de Picu Urriellu. Y es el que tenemos que reivindicar y hacer valer en todas partes. Sirva de estímulo y recordamos que lo de Naranjo le fue puesto al Picu por dos franceses, el conde de Saint-Saud y Ma. Labrouche, lo que justifica la eliminación total de ese anaranjado nombre, dicho sea aquí una vez más.
Sobre esa absurda polémica, que si el Naranjo o Naranco, LA NUEVA ESPAÑA salió al paso de tan absurda y pueril polémica de colegas nacionales publicando importantes y documentados artículos (como aquí dijera recientemente José Manuel Vaquero, "es un periódico al servicio de los asturianos" y de cuanto a su Paraíso Natural se refiere, como lo es en este caso nuestro emblemático Picu Urriellu), de los que destacaremos el firmado por nuestro querido y recordado José Ramón Lueje, titulado "Proceso a un nombre: Naranjo de Bulnes", publicado el 1 de julio de 1970. Aclaremos que la polémica o discusión bizantina que estamos recordando era si Naranjo o Naranco (a nuestro buen amigo Pedro R. Cortés, bien conocido de nuestros lectores, debemos los antecedentes más importantes de la disparatada polémica que estamos desempolvando), cuando en realidad tenía que haber sido entre Picu Urriellu y Naranjo de Bulnes, éste descartable y fuera de lugar, como estamos defendiendo y razonando aquí, y que creo es el sentir generalizado de todos los asturianos.
Hoy no hay polémica alguna al respecto y sí el deseo unánime de que el Picu Urriellu como tal sea conocido en todas partes y a todos los efectos.
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