La Nueva España » Cartas de los lectores » 50 años de Cabaret

50 años de Cabaret

8 de Mayo del 2017 - Marcelo Noboa Fiallo (Gijón)

El pasado 20 de noviembre celebramos medio siglo del estreno de Cabaret, uno de los musicales más emblemáticos del siglo XX. Aquel acontecimiento tuvo lugar en 1966 en el Brodhurst Theatre de Broadway, dirigido por Harold Prince con libreto de Joe Masteroff, música de Jhon Kander y adaptación de la novela "Goodbye to berlín" del escritor Chistopher Isherwood.

La novela y el musical están ambientados en la Alemania de principios de los años 30 cuando el nazismo dejaba de ser una fantasía para convertirse en una atroz realidad. La decadencia del "Kit Kat Klub" y la de sus personajes no dejan de ser más que la metáfora de la decadencia del pueblo alemán, fiel reflejo de los últimos días de la República de Weimar.

Representado en más de 50 países y en 32 lenguas Cabaret en sus 50 años mantiene su frescura. Considerado por los críticos como una obra maestra del teatro musical de todos los tiempos no sólo por su hermosa partitura sino por encima de todo, por su intensidad dramática al escenificar el nacimiento, evolución y expansión de la mayor tragedia del siglo XX en el corazón de Europa, el nazismo.

El musical acierta reproduciendo la atmósfera social que se vive en el Berlín de 1931, víctima de la mayor crisis económica y de valores de su historia. Los berlineses se refugian en un mundo artificial y de bambalinas como lo era el de los cabarets para hacer más soportable sus miserables vidas ("Willkommen, dejen sus problemas fuera, aquí la vida es divina"), mientras la ideología nazi se introduce por todos los espacios que va dejando el miedo al futuro. Sus personajes incapaces de reaccionar ante la barbarie contemplan atónitos, paralizados, la imposición de los nuevos símbolos del terror, "Tomorrow belongs to me" (El mañana me pertenece) cantada por los cachorros nazis y coreada por todos, anticipa como nada y nadie la inevitabilidad del asentamiento social del nacionalsocialismo.

Recuerdo, sin embargo, la primera vez que vi la adaptación cinematográfica del musical (1972), por esa capacidad que tiene el cine de conseguir con una imagen lo que no puede hacer el teatro, dejarnos clavados en la butaca, mientras nuestro cuerpo se eriza o nos brota una lágrima, fue precisamente la interpretación de "Tomorrow belongs to me" la que resumía la conquista de la ideología nazi en el corazón de los alemanes.

Medio siglo ha transcurrido desde el estreno de éste musical/denuncia y ochenta años desde el inicio del exterminio nazi. Parece que nada hemos aprendido desde entonces o que nuestra memoria colectiva es más frágil de lo que podíamos imaginar. Llevamos ya algunos años reproduciendo actitudes, comportamientos, mensajes xenófobos, que recuerdan con alarmante inquietud los prolegómenos de lo que fue la barbarie nazi (Austria, Francia, Holanda...) Hoy, no son los judíos a los que hay que perseguir, hoy son los inmigrantes, los musulmanes en una Europa que se deshace, en la que sus ciudadanos, víctimas de la post-verdad, atrapan el discurso fácil, populista y agresivo de los Le Pen de turno para regocijo de Trump y Putin.

Esperemos que no tengamos que escribir un "Cabaret II"

Marcelo Noboa Fiallo

Xixón, 7 de Mayo de 2017

Cartas

Número de cartas: 45948

Número de cartas en Septiembre: 52

Tribunas

Número de tribunas: 2083

Número de tribunas en Septiembre: 5

Condiciones
Enviar carta por internet

Debe rellenar todos los datos obligatorios solicitados en el formulario. Las cartas deberán tener una extensión equivalente a un folio a doble espacio y podrán ser publicadas tanto en la edición impresa como en la digital.

» Formulario de envío.

Enviar carta por correo convencional

Las cartas a esta sección deberán remitirse mecanografiadas, con una extensión aconsejada de un folio a doble espacio y acompañadas de nombre y apellidos, dirección, fotocopia del DNI y número de teléfono de la persona o personas que la firman a la siguiente dirección:

Calvo Sotelo, 7, 33007 Oviedo
Buscador