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Un derecho, no, un deseo, sí

9 de Mayo del 2017 - Justo Roldán (Oviedo)

El ser padres, el querer tener un hijo, nunca es un derecho que alguien deba de exigir o ejercer, a costa de lo que sea y de quien sea. Un hijo se desea (no existen niños no deseados) y nunca una sociedad civilizada debe de consentir que sea un capricho rebajando su dignidad como ser humano, desde su primer estadio como embrión hasta su nacimiento, aludiendo a un "erróneo derecho".

Estamos asistiendo, en esta vorágine de "tener lo que nos dé la gana", a considerar en firme que los derechos individuales, son universales e ilimitados; así es, que ya hemos sobrepasado y con creces, el límite de la dignidad humana, del respeto, de la ética, y de toda razón y sentido común. La campaña mediática, que se está introduciendo - de una forma sibilina -en aquellas conciencias -muchas aun sin formar- están poniendo en riesgo, los fundamentos más firmes de la familia, y la indefensión más absoluta sobre los futuros hijos; bien por "vientres de alquiler", bien por una fecundación "in vitro" . Y a este sin sentido, participan quienes de una manera u otra, son personajes (o personajillos) más o menos populares, o más o menos famosos...cantantes, futbolistas, actores, tertulianos, artistas, escritores y un largo etc, amén de algún otro médico, que a ello se dedica.

Así exponiendo públicamente su maternidad o su paternidad, quieren dar a entender, que si científicamente se puede, es legítimo. Que la familia compuesta, por un padre y una madre, es un anacronismo, reaccionario, y que un hijo, puede ser perfectamente educado, por un solo padre, una sola madre, dos padres, o dos madres, o gestado dentro de otro vientre. . Y yo me pregunto ¿qué derecho les asiste a quien eso piensan, para traer al mundo a un niño ya huerfano? ¿En qué estudios científicos, pedagógicos, humanísticos, más allá de los experimentales, se basan, si no es solamente, por el "me da la gana", y porque es "mi derechoo" para tal manipulación de la verdad y de la realidad empíricamente probada, desde que el hombre es hombre? No sé qué contestaran, pero yo afirmo, que en ninguno; y esto es demasiado poco, para abrir una puerta, que solo conduce, a la más cruel de las dictaduras: al cientifismo; al hombre dios; al superhombre, mientras los demás, los "adoramos" como tal, los imitamos, porque de lo contrario, somos unos retrógrados, caducos y obsoletos.. A mí, me da igual que así me califiquen, yo soy feliz...ellos, está por ver...Yo desee, a mis hijos....Ellos, exigen el derecho a tenerlos..Yo los engendre con amor. Ellos los materializan, en toda la extensión filosófica del término. Yo los eduque, cuide y crié, en una familia idéntica, a la que me criaron, cuidaron y educaron a mí. Ellos experimentan, pero no "con gaseosa", con seres humanos indefensos, y eso es lo grave.

Allá ellos....lo siento, por los niños, y por el futuro de una sociedad, que dice progresar, pero hacia atrás, volviendo a repetir los errores pasados, pero eso sí, con medios modernos, y más sofisticados.

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