Hasta siempre, querido Luisma
"Suerte, Manolo, te la mereces", fueron las últimas palabras que escuché de mi entrañable amigo Luisma. Esta buena suerte me la dedicaba en vísperas de mi ingreso en el hospital para someterme a una delicada operación.
Poco podría yo imaginar que aquéllas iban a ser las últimas palabras que iba a escuchar de mi querido amigo. Lo próximo que supe de él fue en la cama del Hospital San Agustín; una mañana que para mí se antojaba alegre, pues me habían dado el alta médica, se volvió de pronto triste, muy triste, mi amigo Luisma había fallecido víctima de un fatal accidente de tractor. En principio me costaba creerlo, no podía admitir que aquel joven jovial, alegre, cariñoso y solidario que tan sólo unas semanas antes me había deseado suerte ante mi paso por el quirófano hubiese muerto.
Querido Luisma, te fuiste en la plenitud de la vida, nos has dejado sin palabras, sin nada que nos pueda ayudar a superar tu inesperada desaparición. Todos en Pravia y su comarca te recordaremos siempre como aquel chaval jovial, alegre y bonachón que siempre con la sonrisa en tu rostro nos hacías que se nos contagiara a todos tus amigos.
A tu madre, Montse, y a tu hermano, Marcos, un enorme abrazo y todo nuestro apoyo en estos difíciles momentos. Hasta siempre, querido Luisma.
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