Y ahora que llegó el verano, lucen los coches la verga enhiesta
Parece claro que llegó el verano.
Es, por tanto, evidente que la ciudadanía se moviliza para disfrutar de la estación, por excelencia, de descanso y desconexión rutinaria laboral.
Hasta ahí, todo perfecto; pero, así como los cuerpos se van desprendiendo de ropas, y la piel cambia de color, tatuando, en negativo, la sombra de las mínimamente impúdicas ¿ropitas?, muchos coches lucen nuevas galas en sus bajos fondos (hasta los de pocos caballos) incorporando enganches para el remolque/caravana.
No tengo nada en contra de las caravanas, creo que tiene su espacio y contribuyen a suplir la escasez de plazas hoteleras a precios razonables.
Pero otra cuestión es ese vehículo, comúnmente conducido por un sufrido Rodríguez/za, con calvicie prematura (no tengo nada contra ellos/as) –parezco un político de izquierdas–, que aparca (sobre todo si el espacio es muy justo) los días laborables en una incómoda ciudad, por “la caló”, con ese marcador de distancia, semejante a los codos de las mozas cuando bailábamos en los guateques (menos mal que no tenían codos abajo).
Así, por lo tanto, ¿cómo nos sentimos aparcando detrás de ese fenómeno?
Me viene a la memoria el accesorio, arpón de cuatro filos, del eje de la cuádriga del malo Mesala, enBen-Hur, posteriormente rememorado en la carrera de “bugas” de Grease.
¿Cómo se sentiría el Rodríguez/za viendo una maniobra de aparcamiento, detrás de su coche, sobre todo cuando se pasa lamiendo su aleta trasera?
Si no deben existir elementos salientes del vehículo original, ¿por qué no se sanciona esa irregularidad cuando no está enganchado el remolque.
Supongo que, finalmente, la competencia sería de Tráfico/Industria, es decir, del Gobierno, y aquí topamos con el “gobierno”.Si dividimos esta palabra, al estilo Tip y Coll, con homónimos incluidos, tendríamos: GOBI (sinónimo) desierto de ideas, acciones... - ERNO (antónimo) Ernó Rubik, persona especialmente ingeniosa.
Lo siento por elRodríguez/za, pero tendrá que desmontarlo antes y después de los desplazamientos o vacaciones o ¿tendremos que contárselos con una radial? Los hay de desmontaje sencillo, pero son más caros.
Finalmente, enlazando con el título, lo de “verga”, entiéndase como expresión vulgar, pero, ¿no lo es, talmente a semejanza de un basto graffiti tridimensional?
José Benito Álvarez Bravo
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