Escándalo en el Vaticano
Es de muy mala educación querer entrar sin haber preguntado antes si podemos pasar al apartamento. Las puertas están hechas para llamar, ya que los inquilinos se pueden molestar, por allanamiento de morada y porque veamos que dentro se están poniendo morados. Interrumpen a varios curas en una orgía homosexual con drogas en el Vaticano. ¡Bacanal, en plena Santa Sede! Lo descubrió la Gendarmería Vaticana, que se empezó a mosquear ante la afluencia de personas que entraban, solícitas, a ofrecer sus servicios a la vivienda del prelado, cuando accedió a un apartamento situado en el Santo Oficio propiedad del secretario del Cardenal Coccopalmerio, Cocco, para sus afectuosos amigos, que también se sospecha que puede estar metido en el ajo, porque se pasaba horas interminables (que no muertas) hasta la madrugada, en compañía de su secretario, al que llegó a proponer como obispo para alguna diócesis. En el Vaticano, tienen terminantemente prohibido aburrirse, aunque su comportamiento sea poco católico.
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