Calculando probabilidades
Hace 48 años hice un curso con siete asignaturas de matemáticas: no aprobé ninguna. De todas, salvo de una, conservo el libro: Cálculo diferencial, Cálculo integral, Teoría de funciones de la variable compleja, Cálculo vectorial, Cálculo tensorial, Los problemas lineales de la física, y Cálculo de probabilidades. El profesor de la que no conservo libro, dijo el primer día de clase: «El Cálculo de probabilidades es, con mucho, la ciencia más exacta que vais a conocer. Os dará siempre la más probable percepción de la realidad». Y es que, si se presta atención, se aprende mucho en clase aunque no se apruebe.
Hace unos días, zapeando, vi una entrevista (subtitulada) donde se decía que, por los setenta del siglo pasado, los Estados dejaron de fabricar dinero delegando tal función a los mercados financieros auto-reguladores. Un tema difícil y más con subtítulos, pero hizo pensar. Entonces las tarjetas de crédito se popularizaron y comenzaron a generar macrodatos: dónde se hacía la compra y qué producto se compraba, su costo/cuantía y los ingresos de la cuenta. Era posible pedirle al algoritmo que calculase la probabilidad de éxito de las inversiones. Un fabricante de productos para-farmacéuticos con venta por correo, utilizando macrodatos, programó un algoritmo para que enviase cada tipo de anuncio a la persona adecuada. Los que eran para mujeres embarazadas llegaron a mujeres que aún no sabían que estaban embarazadas, pero lo estaban. Era algo absolutamente imprevisto, pero probable.
Hace 50 años, la Nippon-Steel utilizó a los maestros de convertidor para que, usando microconvertidores LD, hiciesen múltiples coladas de acero (mínimos improductivos para el análisis). Con los datos obtenidos se confeccionó un algoritmo que permitió pasar del máximo rentable de 80 Tm. de acero por colada, a 240 Tm. Esto aumentó la producción y abarató los costes por la alta fiabilidad para producir el pedido. Japón pasó a ser el máximo productor de acero en 1972. Pittsburg y Sheffield, sorprendidas, dejaron de producir acero. Ahora la IA podría usar un robot móvil que habla para obtener la máxima puntuación en la Universidad de Tokio "Tödai". Las universidades ensimismadas, cuando la IA conteste a cualquier pregunta desde la nube de conceptos, se verán sorprendidas. Colegios profesionales examinarían a los candidatos y las empresas con sus contratos los acreditarían. Grupos en red de maestros, alumnos e IA (Universitas Magistrorum et Scholarium), junto a grandes marcas, proveerían clases on-line y prácticas en las empresas.
Existen límites de crecimiento; disminuirá el número de obreros, empleados e incluso profesionales liberales tradicionales; los rencores serán atrozmente reforzados con victimismo y terrorismo; la sociedad democrática se diluirá y la disgregación de la UE dejó ya de ser una posibilidad con el Brexit. ¿Buscarán unirse los históricos imperios de la mar? ¿Harán lo propio los frustrados imperios de tierra? Algo azuza a populismos y enfrentamiento, y los refugiados se agolpan en las fronteras. ¿Colapsará el sistema? Cualquier cambio de modelo económico que se proponga, por muy ingenuo y simple que parezca, sería mejor. ¿Cuál es la probabilidad calculada de que la UE se disgregue en Estados y los Estados en nacionalismos? ¿Cuál la de un renacimiento liberal? ¡A qué se espera! ¿Al anuncio formal de la llegada de neo-taifas y neo-feudalismo?
Debe rellenar todos los datos obligatorios solicitados en el formulario. Las cartas deberán tener una extensión equivalente a un folio a doble espacio y podrán ser publicadas tanto en la edición impresa como en la digital.
Las cartas a esta sección deberán remitirse mecanografiadas, con una extensión aconsejada de un folio a doble espacio y acompañadas de nombre y apellidos, dirección, fotocopia del DNI y número de teléfono de la persona o personas que la firman a la siguiente dirección:
Calvo Sotelo, 7, 33007 Oviedo