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Un mundo cada vez peor

25 de Agosto del 2017 - José Viñas García (Oviedo)

El mundo lo conformamos gentes de diferentes potenciales, culturas, status, posibilidades, creencias y carencias; en ciertos lugares las carencias, se convierten en imposibilidades porque allí donde se vive mejor, explotan y dejan esos mundos de Dios a su suerte.

Antaño, los países, regiones, pueblos, lugares y propiedades eran respetados o invadidos según la capacidad de defensa y ofensa; casi siempre tenía su medida en términos de fuerza bruta. Más adelante, dándose cuenta que esa no era manera de vivir -siempre en tensión- y para impedir que el más fuerte abusara siempre del chico, se fueron creando poco a poco acuerdos de convivencia para que entre todos hiciéramos un mundo un poco más pacífico sin estar cada día a expensas de demostrar nuestra predisposición a luchar y defender lo nuestro. Pasando más adelante a no conformarnos con eso, sino que se firmaron tratados, normas, leyes, derechos y deberes para respetar fronteras, propiedades y personas. Inteligentemente pensaron que vivir opulentamente al lado de quien se moría de asco tampoco era saludable, ya que no sólo por principios de solidaridad, más bien, sabedores que la miseria se propaga más rápidamente que cualquier virus.

Un mundo capaz de convivir con las desigualdades, no poniendo todo de su parte para mejorar esa injusticia, es un mundo cruel, donde la crueldad se apoderará y alterará nuestro modo de vida.

Si en su día, los pueblos lograron con muy poca preparación, pocos medios y posibilidades entenderse para vivir lo más cordialmente que se pudiera ¿por qué ahora no lo intentamos? Solo expandimos odio e incomprensión, tratando simplemente de justificar nuestras tropelías, egoísmos y maldades. De una vez por todas debemos desechar los argumentos falaces de esos tertulianos que nos bombardean cada día, siempre los mismos, saben de todo y nada, ya que estarían mejor callados, reparten odio y son muchos los que les creen. También debemos ser conscientes del poco favor que nos hicimos al elegir y votar semejantes individuos, tan nefastos cómo esos periodistas, sólo pretenden mantenerse en el poder, perjudicando y llevando al mundo a un camino siniestro, sin posibilidades de tirarnos en marcha, ya que les dimos las llaves de puertas y manejo del volante.

Si entendiéramos que ninguna religión está por encima de otra, todas explotan sus misterios (dogmas de fe) incapaces de explicar dudas a los que piden más claridad, consideración y consistencia. En todas ellas, los que asumen la responsabilidad de convertirse en sus apóstoles, obispos, curas, imanes, pastores o monjes, para salir indemnes del marrón, nos sueltan que nuestra mente jamás podrá interpretar esos misterios, pretender llegar a ellos, es condenarse a sufrir la ira de Dios, por incrédulos. Se encuentran mucho mejor entre mentes moldeables e inseguros de sí mismos, los que se dejarán llevar por miedos a un mundo oscuro y un Dios cruel para quien muere en pecado. Cuando si reflexionáramos solo un poquito, si Dios es nuestro Padre ¿Qué padre no sabe perdonar a sus hijos todo? Al menos defectos que heredaron de él: imperfección y debilidad ante los retos y golosinas que nos ofrece esta vida y la incertidumbre para después de ella.

Los cristianos sabemos de crueldades en nombre de nuestra religión: Santa Inquisición, Cruzadas, evangelización del nuevo mundo y también pasear durante años dictadores y tiranos. Por ello, debemos desechar que quien asesina o comete atentados en nombre de Alá, los musulmanes en general tienen algo que ver en ello. Con esto, simplemente serviría para tratar de entendernos todos y buscar salida, que la tiene, a tanta masacre que se avecina si no obligamos a estos dirigentes tan ineptos a cambiar el rumbo al que nos están llevando.

No haría falta poner datos, pero para refrescar memorias: Durante casi siete siglos hasta el año 1800, la persecución a personas señaladas como herejes, brujas, homosexuales, blasfemas, etc., fue de tanta crueldad que describir los juicios dictados por la "Santa Iglesia" da sensación de sentir la barbarie al más alto nivel: acarreos, vejaciones, torturas y humillación pública; para después quemar los cuerpos martirizados y vivos. Los objetos de tortura no los describiré, todos pueden informarse: la "dama de hierro" y la "cuna de Judas" entre los más usados.

Cómo ven, ¿es la religión la culpable? ¡No! Son los que la usan para radicalizarse, manejando a otros con ideas absurdas, de que su Dios o su Alá, les recompensará por tamaña brutalidad.

Sentemos a dialogar, tratemos de entendernos entre diferentes, buscar entre todos una solución al desastre que se avecina: países democráticos, y no tan democráticos (que para negocios, bien que nos entendemos con ellos), Liga Árabe y países del entorno y lejos de él: entre todos buscar remedio al desbarajuste mundial, cargado de abuso, brutalidad, odio, pobreza y desigualdad.

Tendrán que ser Putin, Rajoy, Merkel, Donald Trump, Maduro, Raúl Castro, Correa, etc. Cómo ven dirigentes apropiados para estar cómo estamos, sin posibilidad de cambio a la vista.

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