La Nueva España » Cartas de los lectores » A bayoneta calada

A bayoneta calada

26 de Enero del 2010 - Diego Cózar Rodíguez (Cangas del Narcea)

-Calen bayonetas- dice el señorito marqués con pompa aristocrática, dirigiéndose a la reputeada recua de arrancamoños y esmochacabras que, tras sus plenas existencias comiendo bellotas y mascando nabos tienen la mala suerte de acompañarle aquella mañana. Por Dios y por el Rey-

Y mientras los parias de la tierra se afanan en colocar la bayoneta y cagamentan por lo bajini, alguno de los mas despabilados se preguntará como ha llegado hasta allí. Al lugar donde prepara el asalto a un pico del terreno que nadie querría para sí, para con suerte, desalojar a un enemigo al que para nada le sirve. Además en compañía de la más selecta carne de cañón, la chusma de la ciudad con la que no compartirías ni la hora, y los encallecidos y atónitos montañeses que todo imperio que se precie mandaba con regularidad a dar la vida en servicio de la patria, no sin antes desalojarlos a culatazos de su terruño en pos claro está de los más altos fines.

Y me gusta imaginarme, aunque ya sea mucho imaginar, a algún realista entre las filas planteándose dejarse caer sobre su propia bayoneta, por aquello de ahorrarle el engorroso trabajo al enemigo y con suerte, conseguir un rasguño con aires de importancia que le exima de dar la vida por la patria, que para algo paga ya uno bastantes impuestos.

De vuelta al presente, en este cívico siglo nuestro, sería difícil encontrarnos en semejante tesitura. Pero salvando las distancias y como experimentadísimo universitario que soy, los exámenes de febrero me hacen sentir parte del montón, un montón mucho más académico y aseado que el referido anteriormente, pero al fin y al cabo me siento como uno más de entre los muchos que se disponen a librar sus pequeñas batallas ahora en pos de titulación académica. Después de todo ya no hay vuelta atrás, pues importa poco el camino andado cuando todo depende del resultado del inmediato desafío.

Hay que correr para no quedarse atrás, ser el primero en llegar a la cima y mantenerse, ser un ejemplo para los compañeros y un referente para todos los demás, de esfuerzo y sacrificio, con dedicación y tesón ¿Pero que ocurre si al llegar a la cima sólo nos espera la larga cola del paro?

Servidor esta cerca de plantearse aquello de saltar sobre la propia bayoneta, por aquello de ahorrarle el engorro a la gente de las oficinas de empleo, que cuatro millones de parados ya es mucha vaca para cargar en brazos como para que llegue yo a empeorar la situación, menudo alarde de patriotismo sería. Y que quede claro que si lo hago no será ni por Dios ni por el Rey porque, y aquí es donde se nota el progreso, en el siglo XXI esta más de moda ser ateo y republicano.

Más en: http://diegocozar.wordpress.com/

Cartas

Número de cartas: 45931

Número de cartas en Septiembre: 35

Tribunas

Número de tribunas: 2081

Número de tribunas en Septiembre: 3

Condiciones
Enviar carta por internet

Debe rellenar todos los datos obligatorios solicitados en el formulario. Las cartas deberán tener una extensión equivalente a un folio a doble espacio y podrán ser publicadas tanto en la edición impresa como en la digital.

» Formulario de envío.

Enviar carta por correo convencional

Las cartas a esta sección deberán remitirse mecanografiadas, con una extensión aconsejada de un folio a doble espacio y acompañadas de nombre y apellidos, dirección, fotocopia del DNI y número de teléfono de la persona o personas que la firman a la siguiente dirección:

Calvo Sotelo, 7, 33007 Oviedo
Buscador