Parlamento sin parlamentarios
En democracia, la mejor manera de aunar el sentir y la voluntad general de los ciudadanos son unas elecciones; no existe una referencia más "precisa" con sus matices importantes, ya que si pretendemos entresacar de los resultados generales vínculos para sumarlos a nuestros intereses o sentimientos particulares, estaremos haciendo trampa; ya que en unas elecciones autonómicas cómo en el caso de Cataluña, no se sometieron a los ciudadanos a una consulta para que se manifestaran en contra o a favor de una pregunta en concreto; los ciudadanos votan la suma de propuestas y a veces eligen entre lo menos malo, sin que ello nos lleve a la conclusión que quienes votaron a ciertos partidos son todos independentistas porque sus dirigentes sueñan serlo.
Por eso los partidos independentistas (eludiendo ese matiz importante de que los resultados de las elecciones jamás se pueden vincular con un plebiscito a la independencia) adelantaron una y otra vez todas las elecciones autonómicas intentando alcanzar esa suma de ilusiones o intereses, para alcanzar sus sueños y sentimientos imposibles saltándose leyes, Constitución y pervirtiendo la propia democracia. En todas, nada lograron que les hiciera pensar que tenían la mayoría suficiente para tamaña empresa; hasta que en estas últimas intentando a la desesperada todo, se presentaron unidos partidos de extrema derecha y la izquierda más radical; el cómo fue posible, todos tenemos nuestras propias conclusiones, los unos porque lo sienten de verdad, otros porque se quedaban atrás, algunos porque es cierto que el PP da pie a alejarse de sus preceptos y los más porque querían tapar, esconder o eludir la Justicia creando su propio Tribunal que les absolviera. Pues con todo eso, el resultado tampoco da pie a que esa suma el 48% se cogieran las atribuciones que emprendieron. Para ese tipo de decisiones, se necesitarían porcentajes cercanos a los ¾ del electorado, no vale mayoría simple.
En vista de que las elecciones no les dan para lo que pretenden, deciden hacer un referéndum con una sola pregunta, cuando incluso tuvieran la competencia, que no la tienen, para llevarlo a cabo, las preguntas debieran ser menos determinantes, concluyentes y con opciones a matices.
Es curioso, ahora les da por reclamar referéndum, cuando los nacionalistas llevan toda la vida gobernando en Cataluña. ¿Cuándo hicieron referéndum para otros temas más importantes para los ciudadanos y que ellos sí tienen la competencia para llevarlos a cabo? Por ejemplo: ¿Están ustedes los catalanes de acuerdo con nuestra política económica de empleo y salarios? ¿Están contentos ustedes los catalanes con las listas de espera de nuestra sanidad? ¿Están conformes con la deriva de nuestros políticos más dados a perder el tiempo en sus sueños, que en servir a la sociedad catalana? ¿Quieren un estado independiente, a sabiendas que nos quedaremos fuera de la UE, no tendremos posibilidad de financiación y todo el desarrollo del proceso nos llevará tiempo, contratiempos, dinero y precariedad?
Para ser más precisos al tema que nos ocupa, la pregunta correcta sería: ¿En qué marco territorial se encontrarían más confortables? 1) República independiente. 2) Estado federal. 3) Autonomía con más trasferencias asumidas. 4) Mejor dejar cómo estamos. 5) Que sean otros los políticos que negocien y lleguen a solucionarlos los problemas, etc... Cómo ven, resumir en un -sí o un no- todo este berenjenal es simplemente un disparate que no debemos aceptar jamás.
El parlamento está para eso: Para parlamentar. Allí deben arreglarse todas y cada una de las controversias. Algunos dicen que es un tema político, en efecto, pero cuando ustedes, todos, son incapaces de respetar e interpretar nuestro estado de derecho, usando los templos sagrados de cualquier democracia para discutir, acordar, entenderse y solucionar todo; los tribunales, fiscales y jueces deben intervenir. ¡Claro que sí!
En nombre de la democracia lo único que vale es aceptar las reglas de juego que nos dimos entre todos, el resto es insubordinación y nada más.
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