Un solar calcinado
Nuestra naturaleza se muere en llamas. España se está convirtiendo en un solar calcinado, 11.500 hectáreas ardieron en tres días. Los técnicos de la lucha contra incendios en España nos alertaban de la llegada del huracán “Ofelia” y de las múltiples consecuencias que su peso podría tener para el norte de la Península Ibérica, pese a ser reforzado el dispositivo en previsión de circunstancias especiales por el Ministerio de Agricultura y Pesca, Alimentación y Medio Ambiente, junto con el Ministerio del Interior, que habían realizado un gran esfuerzo para defender las casas, cultivos, montes, linderos y las personas, sus bienes y la naturaleza que acabó en cenizas.
El huracán “Ofelia” ha llegado en un momento en el que las lluvias escasean, y el agua en el Norte parece un milagro. En los últimos años se han reforzado las áreas de previsión y también endurecido las penas para los pirómanos. Y pese a ello, lo ocurrido en Galicia no ha sido todo como consecuencia de la escasez de lluvias, ni de los vientos fortísimos que han desbordado todas las previsiones. La gran amenaza en Galicia no fue el huracán “Ofelia” sino esos 132 fuegos de incendiarios que se valieron de las condiciones meteorológicas para atacar a nuestro patrimonio y nuestras vidas. Las imágenes de Galicia nos dejaron el corazón destrozado, pensar que todo aquello que estamos viendo está pasando a nuestro alrededor, en Galicia donde hay cuatro muertos, dos en Asturias y corre el peligro nuestro famoso bosque de Muniellos, reserva de la biosfera. No alcanzamos a comprender cómo el ser humano puede ser tan miserable y ruin, para destrozar su propio hábitat, su propia naturaleza.
España se está convirtiendo en un solar calcinado, nuestra naturaleza muere en llamas, ya habíamos escuchado que muchos incendios son intencionados, lo de Galicia, más de 130, con varios focos, no deja lugar a duda alguna, 27 en Asturias en 12 concejos y cerca de 500 en Portugal. Ni Policía ni autoridades dudan de que son intencionados, y ya hablan de terrorismo incendiario. Urge la noticia de la identificación de los causantes y conocer esas motivaciones, para eliminar todo el beneficio oculto de un fuego devastador que no puede achacarse a causas naturales.
Benigno Martínez-Fuego
Marcenado (Siero)
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