Algo le falta a nuestro sistema
No puede ser que nos encontremos con alcaldes, presidentes y gestores en general que siendo conscientes todos nosotros que su parcela es un desastre, los tengamos que aguantar y soportar cuatro años hasta las siguientes elecciones. Ya no digamos, si se embarcan en ensueños y panaceas fuera de los principios constitucionales que entre todos asumimos en un estado democrático, galante y solidario. Tiene que existir un método de evaluación y expulsión (un organismo independiente, con potestad y elegido en las urnas) para que nadie pueda aferrarse al cargo sin posibilidades de ser destituido cuando sea un cúmulo de holgazanería, despropósitos, ineptitudes y sospechas fundadas de corruptela y desacato.
Todos podemos observarlo a diario, las listas son cerradas, se colocan en cabeza los más espabilados y caraduras, no los más preparados. Por ese orden se hacen con los bastones de mando de ayuntamientos y gobiernos, lo cual el desastre está servido; ya que, de los mediocres no esperemos más que lo innecesario. Tenemos presidentes, diputados, senadores, concejales, etc. que llevan toda su vida viviendo de esto, sin observarles que se esmeren o sobresalgan en propuestas y soluciones a nada.
En la vida pública, sólo deberían estar los útiles y comprometidos. Podríamos poner ejemplos a cientos que están, pero ¿para qué?: Señor Llamazares ¿cuántos años lleva en esto? Díganos alguna letra y música de alguna canción que usted, por si solito, compusiera para disfrute y mejora de la vida de todos. Tantos años de sesteo, cobrar de todos nosotros, para que la hemeroteca nos diga que su labor fue siempre sentarse a la sombra de su propia figura.
Tenemos lo contrapuesto, para observar la diferencia: Suárez, Felipe, Guerra y compañía, que fueron políticos en su día que aportaron grandes avances en mejoras sociales, de libertad, seguridad, reformas y leyes importantes que hicieron la vida más y mejor a los españoles. Tenemos a Zapatero con sus leyes de dependencia, acabar con ETA, tráfico, circulación y seguridad vial; tabaco, matrimonio gay, etc. Estos señores sí honraron su vida al servicio de los demás. Es más, muchas veces teniéndoles a ustedes (los innecesarios) poniendo trabas a todo, solo buscando protagonismo, demagogia y sacar tajada electoral.
En Asturias sin ir más lejos ¿que hizo de resaltable el Señor Javier Fernández durante sus años de diputado y de presidente? ¡blufg! Solo encontraremos una gestión nefasta. ¿Por qué tuvimos que soportarlo tanto tiempo sin posibilidades de largarlo de una vez? Donde Asturias retrocedió en cantidad y calidad sin que éste sujeto se fuera corriendo por sí mismo sin que nadie le persiguiera, solo su conciencia.
En España, de este tipo de políticos está repleto el panorama. Se introducen con toda su cara, sabiéndose ineptos para todo, y allí resisten a sabiendas de que perjudican a los demás. No dejan espacio para que lo ocupen personas más capaces, se apoltronan sin más, haciendo un daño tremendo a todos.
El sistema democrático se puede mejorar con un poco de imaginación. Las leyes, códigos penales y civiles autoimpuestos están muy bien; pero necesitan un contrafuerte en forma de vigilancia continuada, para que los indicios nos pongan en alerta y se pueda actuar sin recurrir a una Justicia saturada y demasiado lenta, que deja a los canallas demasiado tiempo y ámbito para seguir perjudicando y entreteniendo a todos.
Cuando se está perpetrando un atraco a un banco, los policías no esperan una orden judicial para actuar ¿por qué ante los golfos políticos se tiene que tener tanto celo, cuando se sabe que nos están robando y manteniéndonos de rehenes a todos? Algo falta en nuestro sistema para que nadie que juegue a perverso, se le consienta estar (menos concurrir a unas elecciones) mientras los jueces buscan un encuadre y tiempo en su agenda repleta.
José Viñas García, Limanes (Oviedo
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