Un grave daño a España

La historia de la abortada independencia de Cataluña continúa en varios frentes. La aplicación del artículo 155 por parte del Gobierno de la nación está dando muchos quebraderos de cabeza por la intransigencia de los partidos políticos independentistas catalanes, de algún partido estatal de izquierdas y de partes interesadas en que haya desestabilización política en España. Cuando ya había tensión en la calle durante aquellos días de la declaración de independencia por parte del Parlamento de Cataluña, ahora se suma la del ingreso en prisión de parte de los miembros del Gobierno de esa comunidad. Sobre este proceder hay dispares opiniones desde diversos ámbitos tanto políticos como sociales. Hay opiniones a favor del encarcelamiento de los golpistas pero también las hay en contra de dicha decisión judicial. Desde la Asociación de Jueces a la que pertenece Dª Carmen Lamela, se han pronunciado en contra de su decisión. Esto es lo que llama la atención, cuando lo que tenían que hacer era apoyarla, se ponen en su contra. Debe de ser que el Gobierno de la nación y su Presidente no son de su agrado. O puede que quizá algunos de esos jueces sean catalanes partidarios de la independencia. Y para echar más gasolina al fuego, un día sí y otro también en Cataluña las calles se llenan de manifestantes pidiendo la liberación de esos supuestos presos políticos. Menos mal que el cerebro de este conflicto aún está fuera de España, si estuviese encarcelado seríamos noticia de primera página diariamente en todos los periódicos del mundo.

Hay algunas declaraciones de destacados miembros de ambos sexos de la política que merecen ser investigadas. Por ejemplo las amenazas beligerantes de la Alcaldesa de Barcelona, Sra. Colau que tiene preparadas las mejores tropas guerreras para atacar a España. Seguramente la mayoría de los soldados serán chinos, de cuya nacionalidad abundan en Cataluña. Las armas a utilizar serán de fabricación casera, como los tirachinas. Tras esas amenazas está el odio que siente por nuestro país y sus ciudadanos. La incitación al odio está considerado delito en nuestro Código Penal. Pero claro, como la heredera de La Pasionaria es extranjera, se quedó tan tranquila. Otro personaje que merece una investigación es el productor de ese bodrio televisivo conocido como O.T. (Operación Triunfo) que insultó de forma grosera a España y a nuestro Jefe de Estado, S.M. D. Felipe VI. Los servicios jurídicos de RTVE deberían de activar el protocolo de ética para rescindir el contrato al susodicho energúmeno del citado programa académico y musical. Y que voy a decir del secretario general de Podemos, el controvertido D. Pablo Iglesias, que alaba la decisión del juez de Bruselas poniéndole como ejemplo frente a la Justicia española. Si el día 17 le comunica al Sr. Puigdemont y sus mosqueteros que los va a extraditar a España, vamos a ver a este problemático político podemita cambiar de opinión, como hace siempre.

Pero lo más vergonzoso y preocupante son las actividades llevadas a cabo por los rebeldes que se encuentran en Bruselas, uno de los paraísos de varios etarras que tuvieron allí a un buen abogado defensor, el mismo que ahora defiende a los victimitas catalanes. Sus declaraciones a la prensa de muchos países poniendo a nuestro país como ejemplo de dictadura y de antidemocracia, no nos hacen ningún favor, más bien lo contrario. Su declaración al Sr. Juez de que si lo extraditaba a España estallaría una guerra civil, es una muestra de su visible locura y que se siente acorralado incluso fuera de sus fronteras. También hubo declaraciones de destacados políticos belgas que deberían de ser objeto de estudio por parte del Ministerio de Asuntos Exteriores, lo mínimo llamar a nuestro embajador a consultas. Esto podría dar lugar a un conflicto diplomático entre los dos países, sobre por la declaración del viceprimer ministro por acusar a nuestro Gobierno de excederse en la aplicación de las medidas tomadas por la declaración de la independencia por parte de las autoridades sublevadas.

De aquí al día 21 de diciembre todavía pueden pasar muchas cosas, ya que la temperatura de los independentistas está subiendo por la incertidumbre del resultado de las convocadas elecciones al Parlamento. Es de suponer que el Gobierno español esté tomando precauciones extras para evitar un confrontación entre la población dadas las repetidas amenazas de algunos grupos extremistas que pretenden coaccionar a los votantes pidiéndoles el voto. Pero esto además se puede agravar si concurren a los comicios los golpistas, estén o no encarcelados. En el resultado de esas elecciones van a tener que movilizarse todos los ciudadanos catalanes partidarios de seguir Cataluña dentro de España, para obtener un abultado resultado satisfactorio y evitar una confrontación incluso física entre unos y otros, pues en caso contrario la separación de Cataluña será inevitable, porque será ahora o nunca. Lo peor será lo que venga después. Todos los catalanes deberían de reflexionar a quién van a votar, sobre todo los nacionalistas, porque en las anteriores elecciones del 2015 fueron engañados por los partidos que gobernaron estos dos últimos años. El candidato que resultó elegido Presidente en el Parlamento no era el candidato que se presentaba en las elecciones, el verdadero ganador fue derrotado por diez malvados políticos que lo dejaron fuera del Parlamento. Sería muy de agradecer por todos los españoles sin excepción, que pudiésemos pasar unas Navidades tranquilas y que todo volviese a la normalidad.

Ángel Muñiz Fernández. Oviedo