Que fichen
El verdadero motivo por el que no se ficha en el Sespa, al igual que ocurre con los políticos de la Junta General, se debe a las presiones de quienes tienen intereses paralelos que compaginan con su actividad en el Sespa o en la Junta General.
Argüir que si se ficha se interrumpirían intervenciones quirúrgicas es una excusa pueril: ¿acaso todo el personal se dedica a realizar intervenciones quirúrgicas? ¿No están programadas éstas dentro del horario de trabajo? ¿Trabajan todos las 2,5 horas de más a la semana, o unos sí y otros no?
Lo que en realidad se encubre es que quienes están más interesados en que no se fiche son aquéllos que tienen otra actividad en horario vespertino. Si la misma comienza a las 16.00 horas o poco más, ¿cómo se explica que salgan a las 15.00 horas, se desplacen, coman y lleguen a su actividad a las 16.00 horas? Luego es lógico que no tengan ningún interés en que se les controle el horario de entrada y salida.
De este modo hay un agravio comparativo entre quienes cumplen con su deber y quienes pasan de todo y, encima, están quitando el puesto de trabajo a los parados al dedicarse al pluriempleo. ¿Por qué gana lo mismo quien entra y sale a la hora que quien entra tarde y marcha antes de tiempo?
Como hay un malestar entre los trabajadores, que los vagos que buscan la manera de quedarse de baja laboral (hay un alto absentismo laboral, como ocurre con la categoría de celadores, donde el HUCA ha tenido que echar mano del Inem para cubrir dichas bajas).
¿Es lógico que se sobrecargue de tarea a los trabajadores por culpa de unos avariciosos que se dedican al pluriempleo por las tardes, o de unos vagos que se pasan de baja laboral la mayor parte del año, año tras año? Todo esto se traduce en un mayor gasto sanitario. Si se cumpliese el horario, no habría peonadas, ni se generarían listas de espera para enriquecimiento de la sanidad privada, ni se mantendría con el 100% de su sueldo a quienes se pasan de baja gran parte del año. Como tampoco se sobrecargaría el trabajo de quienes tienen que realizar el suyo y el de los ausentes.
En EE UU el personal entra a las 08.00 horas y se pone a trabajar, pero allí hay un control, no por políticos, ni por personal sanitario, los centros sanitarios están bajo supervisión de economistas, con auditorías anuales, pues buscan la rentabilidad, y ésta se logra realizando el trabajo.
Pero esto no se hace aquí, pues habría personal que sería cesado por incumplimiento de su deber, porque se acabaría el negocio paralelo vespertino, así como el de la medicina privada que absorbe los retrasos generados por incumplimiento del horario.
Aquí son los propios políticos los que se están cargando la sanidad pública, por oscuros intereses particulares –los mismos que llevaron a las privatizaciones de bienes públicos en las tres últimas décadas, los mismos políticos a los que se les llena la boca con la defensa de los intereses de España y demás, cuando en realidad su única patria es su bolsillo–. Políticos que se suben sus propios salarios y acuden a la Junta General una vez a la semana.
De igual modo la Fiscalía de Asturias –¿para qué sirve?– no se inmiscuye en los trabajos y negocios de los políticos, ni en la marcha del Sespa y los negocios sanitarios privados, pues una investigación podría sacar a la luz la estrecha relación entre el alto absentismo laboral y jubilaciones por enfermedad que hay en Asturias, con los informes a medida que obtienen en clínicas y consultas privadas los que luego, una vez jubilados por “enfermedad”, están muy sanos para dedicarse a la economía sumergida –Asturias lidera las regiones con mayor índice de economía sumergida–, gracias a la cual, y al fraude laboral –bajas laborales, jubilaciones por enfermedad fraudulentamente logradas– se facilitan las reformas laborales y privatizaciones.
Por eso los políticos de la Junta General callan, por el negocio que tienen en perspectiva para cuando se les acabe el cuento de la política.
La sanidad y las pensiones es un negocio que piensan repartirse PP&PSOE, junto a sus escuderos Foro y Ciudadanos.
José María Álvarez
Oviedo
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