Conmovedor, el premio Derechos Humanos Siero de 2017
Se le ha concedido este año el premio Derechos Humanos Siero-2017 al Comité Cívico de Organizaciones Populares e Indígenas de Honduras (COPINH).
Su presidenta, Berta Cáceres, ecologista, activista de medio ambiente y defensora a ultranza de los Derechos Humanos en aquel país, fue asesinada el 3 de marzo de 2016.
Tengo que dar la enhorabuena a estas organizaciones por su tesón y lucha en la defensa de sus comunidades (toda mi simpatía, apoyo y solidaridad), y al jurado por su acierto en concederles este premio.
El día 11 de este mes de diciembre se celebró la entrega de ese premio.
He estado presente en el acto desde las 19.00 horas en punto de ese día, y tengo que decir que la ceremonia fue muy emotiva e interesante por lo que allí se expuso. ¡Lo que está ocurriendo en Honduras es tremendo!
Los dos muchachos hondureños que vinieron a recoger el premio conmovieron y emocionaron a todos los que estábamos en la sala. ¡Fuerza, valor, coraje y valentía la de estos jóvenes!
Al padre de uno de los muchachos lo asesinaron y a él lo hirieron de bala. Creo que por parte del Ayuntamiento de Siero sería conveniente y deseable que se siguiese en contacto con estas organizaciones que han conseguido estos premios, para ver cómo se canalizan estas ayudas económicas.
La labor de estas organizaciones defensoras de los derechos humanos es inmensa.
He notado algunas ausencias significativas de algunos representantes políticos del concejo en este acto.
No sé si será a consecuencia del ponente que habló en nombre del Consejo Local de Solidaridad.
Este señor se manifestó, megáfono en mano, delante del Consistorio de Siero en contra de la presencia del padre del opositor venezolano al régimen de Nicolás Maduro, Leopoldo López, en mayo del año pasado (cuando éste estaba hablando desde el balcón del Ayuntamiento).
En esta manifestación de protesta por parte de seguidores del régimen bolivariano, se produjeron unos desgraciados incidentes, con insultos y descalificaciones al Alcalde y a muchos concejales a la salida del Consistorio, que tuvieron repercusión en los medios de comunicación de todo el país, dejando a los ciudadanos de Pola de Siero y del resto del municipio a la altura del betún.
Lo más triste de todo fueron los abucheos y el linchamiento de algunos energúmenos contra el padre de este opositor.
No se puede estar a favor de los derechos humanos de unos (cuando nos interesa) y en contra de otros (cuando no nos interesa).
A esto yo lo llamo sectarismo y manipulación.
En mi modesta opinión esto descalifica al personaje.
Sería conveniente que las asociaciones que componen el Consejo Local de Solidaridad del concejo de Siero tomaran cartas en el asunto y eligiesen a un representante más idóneo y, sobre todo, imparcial para estos actos.
Yo, y muchísima gente, se lo agradeceríamos enormemente.
Para mí, como ciudadano, es un honor que el Ayuntamiento de Siero entregue todos los años un premio de derechos humanos a personas u organizaciones que en este planeta luchan contra todo tipo de discriminaciones e injusticias.
Y como colofón, la maravillosa y solidaria Orquesta de Cámara de Siero (OCAS), con su director Manuel Paz a la guitarra, nos interpretaron tres bonitos temas musicales.
Que todos los lectores de LA NUEVA ESPAÑA tengan un buen día.
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