La Nueva España » Cartas de los lectores » Las mujeres visibles

Las mujeres visibles

7 de Febrero del 2018 - María Isabel Sánchez Agüeria (Gijón)

50 años. Mujer. Ingeniera. 25 años de profesión. Profesión con muy poca presencia femenina cuando yo empecé. Desarrollo mi trabajo en una empresa privada del sector industrial con ámbito internacional. Dentro de mi trabajo me he encontrado de todo: hombres que ni me dirigían la palabra por ser mujer, hombres que me trataban como si fuera su hija y hombres que me han tratado de igual a igual. Cuando me han ignorado, yo también les he ignorado. Cuando me trataban con condescendencia lo utilizaba para aprender; preguntaba y escuchaba. Y con este enfoque he llegado donde estoy ahora. Muy orgullosa porque lo he conseguido por mí misma y muy agradecida a mi empresa porque en ningún momento me he sentido discriminada dentro de la misma, y eso, en una empresa privada y en el sector en que desarrolla su trabajo, no es norma común.

Tampoco me siento discriminada cuando en una reunión donde hay hombres y mujeres se utiliza el masculino genérico para referirse a los presentes. En el idioma castellano, el género masculino "no marca" cuando se refiere a un conjunto mixto. Es un neutro en el cual no se excluye a la parte femenina. Y como mi idioma es el castellano, no me siento excluida si no se me menciona explícitamente. En cambio, me hace sentirme "diferente" si el orador hace el desdoblamiento género masculino, género femenino: "ingeniero e ingeniera", "ciudadano y ciudadana", "todos y todas", etc... Por cierto, puestos a hilar fino, ¿se debería nombrar primero al género masculino o al femenino? En cualquier caso se discriminaría a un género en favor del otro y estaríamos en las mismas, ¿verdad?

En cambio, admitimos la definición de "violencia de género" para el maltrato de un hombre a una mujer o de una mujer a un hombre. Si tanto nos gusta diferenciar lo masculino de lo femenino deberíamos llamarlo "violencia machista" cada vez que un hombre maltrata o mata a una mujer y "violencia feminista" si es al contrario, en lugar de utilizar el genérico, ¿no?

A donde quiero llegar es a que yo me siento igual a un hombre. No soy igual físicamente, ni externa ni internamente. Y puedo aceptar también que esa diferencia física condicione diferencias psíquicas. Pero en cuanto a capacidad intelectual, nadie me va a convencer de que existe diferencias entre mujeres y hombres. Creo que los extremismos feministas nos hacen más daño que bien. Esa avidez por hacernos "visibles" nos está haciendo "demasiado visibles" y eso no es igualdad. Igualdad es sentirse igual. Si en unas oposiciones se convocan unas plazas "exclusivas para mujeres", eso me hace sentirme diferente. Si en una empresa hay reservado un número de puestos de trabajo "exclusivos para mujeres", eso me hace sentirme diferente. Si unas pruebas de acceso a un trabajo son "distintas" para hombres y para mujeres, eso me hace sentirme diferente. Si un puesto de trabajo requiere de unas condiciones determinadas, no quiero que lo ocupe un hombre que no esté preparado para él. Pero tampoco quiero facilidades para que ese puesto lo ocupe una mujer que tampoco esté preparada. Por poner un ejemplo simplón: si me estoy quemando y veo venir a un bombero a rescatarme, y ese bombero es una mujer, ¿debo preocuparme pensando que quizá no haya superado las mismas pruebas que un hombre y que le hayan dado más facilidades?

A mi modo de ver, eso no es igualdad. Yo no quiero tener más facilidades ni más oportunidades que un hombre. Quiero las mismas que tiene un hombre. Exijo las mismas. Merezco las mismas. Reivindico las mismas. Quiero poder optar a lo mismo que opta un hombre pero no quiero que me lo den sólo por ser mujer. Quiero ganármelo yo y quiero que se me reconozca. Para mí eso es igualdad. Esa debe ser nuestra lucha. Y creo que esa lucha se está desvirtuando. No veo que se esté pidiendo igualdad de derechos. Lo que veo que se está pidiendo son favoritismos por ser mujer.

Antes he mencionado el término violencia de género. Los maltratadores, los violadores, los asesinos de mujeres son eso: maltratadores, violadores y asesinos, y punto. ¿O son peores por haber asesinado, violado o maltratado a una mujer? Para mí son igual de deleznables que el asesino, violador y maltratador de un hombre, o de un niño, o de un anciano. Condeno por igual cada caso de violencia. Y también condeno que algunas mujeres, amparándose precisamente en su condición de mujer, mientan y finjan abusos o maltratos para sacar un beneficio personal, humillar a un hombre por despecho o simplemente y tener un minuto de actualidad. El comportamiento de abuso de posición de ciertos hombres para conseguir favores de las mujeres en cualquier campo es inaceptable. Pero hay ocasiones en las que ese abuso se convierte en trueque. Quiero decir que no podemos pretender igualdad si nosotras mismas nos aprovechamos de esa desigualdad.

Para mí, nos hacemos "visibles" si denunciamos todos los casos de desigualdad y de abusos que se comentan o quieran cometer contra nosotras. Se nos hace "visibles" cuando no hay cómplices de esos abusos. Se nos hace "visibles" cuando no se nos hace sentir "diferentes".

Cartas

Número de cartas: 49001

Número de cartas en Diciembre: 124

Tribunas

Número de tribunas: 2175

Número de tribunas en Diciembre: 3

Condiciones
Enviar carta por internet

Debe rellenar todos los datos obligatorios solicitados en el formulario. Las cartas deberán tener una extensión equivalente a un folio a doble espacio y podrán ser publicadas tanto en la edición impresa como en la digital.

» Formulario de envío.

Enviar carta por correo convencional

Las cartas a esta sección deberán remitirse mecanografiadas, con una extensión aconsejada de un folio a doble espacio y acompañadas de nombre y apellidos, dirección, fotocopia del DNI y número de teléfono de la persona o personas que la firman a la siguiente dirección:

Calvo Sotelo, 7, 33007 Oviedo
Buscador