Carta a la Asociación de Fabricantes de Áridos
Lo primero, me presento, me llamo Lucía y soy vecina de Priorio. Conocerán muy bien esta parroquia, ya que la cantera de uno de sus asociados lleva a cabo su actividad en la parte de detrás de mi casa, casa en la que llevo viviendo un año y medio, pero que perteneció a mis abuelos.
He leído su “página especial” en el periódico con mucho interés. Estoy de acuerdo en eso de que (y cito textualmente) “la industria productora de áridos, es decir, arena o rocas fragmentadas, es uno de los subsectores básicos de la minería española y mundial. Son materias primas minerales indispensables para la sociedad y, en general, se trata de materiales baratos y abundantes que se explotan necesariamente cerca de los centros de consumo, con el fin de reducir los costes de transporte, incluidos los ambientales....”.
No he podido evitar pararme a pensar en estas palabras suyas. Tengo 35 años y siempre he estado ligada a mi pueblo, y desde que tengo uso de razón esta cantera ha estado aquí, y ha estado realizando su actividad sin ningún problema, ya que los vecinos de la zona en ese entonces eran conscientes de la necesidad de este tipo de industria, y sacrificaron su entorno para no entorpecer el progreso.
Pero cuál ha sido mi sorpresa cuando hace unos pocos días me entero de que esa empresa necesaria, sostenible y que tan en cuenta tiene (según sus palabras) eso de “reducir costes de transporte y ambientales”, empresa que (como ustedes destacan en su artículo/publicidad/lavado de cara) “contribuye a la conservación del medio ambiente, con políticas avanzadas de gestión de la biodiversidad y con sus inversiones en medidas preventivas y correctoras”, quiere instalar detrás de mi casa, a menos de 300 metros de otras casas, en una zona con varios BIC, con especies protegidas, zonas verdes, instalaciones deportivas, colegios, una planta de asfalto y otra de hormigón. Este hecho me genera unas inquietudes, y como he leído en ese mismo artículo/publicidad/lavado de cara que esta asociación existe desde 1989 y que uno de sus fines es el de “informar a la sociedad sobre la importancia de la piedra y sus derivados”, a continuación procedo a exponerles mis dudas:
1.- Me gustaría saber qué tiene de sostenible y qué contribución a la conservación de la biodiversidad aporta la construcción de una planta de asfalto y el traslado de una de hormigón a esa zona, y tan cerca de viviendas habitadas por personas. Parece que la única especie que no está protegida es el ser humano, ya que parece que es lícito instalar una industria altamente contaminante al lado de su hábitat.
2.- Quisiera saber qué gases emite una industria transformadora de árido en asfalto y qué riesgos tiene para la salud, ya que como vecina de la zona me interesa este asunto en especial.
3.- Quizá, como otros organismos han hecho, deberían informar un poco a la población de la zona y hacer una asamblea informativa contándonos todo lo bueno de tener al lado de casa este tipo de empresa. Les invito a que como asociación nos vengan a contar que es fantástico tener al lado de casa una industria altamente contaminante, y que los gases que emite son totalmente inocuos, porque si es al contrario y son sustancias peligrosas para la salud de las personas, entonces perdónenme pero no entiendo los beneficios de esta industria del asfalto.
Muchas gracias por contarnos a la población afectada los beneficios para la sociedad y el progreso de las canteras. Ahora, les pido encarecidamente que den la cara para tranquilizarnos a todos y nos cuenten que respirar esos gases y soportar esos olores no nos va a provocar ni cosquillas en la pituitaria.
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