Carta a la señora ministra sobre la homeopatía
Sra. ministra: ¿me va a decir usted que los 10.000 pacientes que he visto en consulta durante más de 30 años no se ha curado ninguno y que son tan masoquistas y tan estúpidos que vuelven una y otra vez a curarse de sus problemas?
Sra. ministra: ¿me va a decir usted que el 30 por ciento de la población española es idiota por acudir a la homeopatía para solucionar sus problemas? Que sepa su ilustrísima que son un 30 por ciento de votos y que no están dispuestos a perder sus derechos por satisfacerla a usted.
Sra. ministra: ¿sabe usted que la homeopatía ha demostrado que tiene bases científicas sólidas y veraces?
Sra. ministra: ¿Me puede usted decir qué cura la medicina que usted defiende? Acaso ha logrado que un hipertenso deje de serlo tomando pastillas antihipertensivas, cuando las dejan o incluso tomándolas tienen cifras altas de tensión arterial y además un montón de efectos secundarios que usted y yo sabemos de sobra. Y lo mismo para cualquier otra patología que no curan. No proyecte en los demás los defectos de lo que defiende. La homeopatía cura.
Sra. Ministra: ¿Usted sabe que los pacientes que atendemos son en su mayoría desahuciados de la medicina dominante que usted defiende? Por desgracia tenemos que atender a multitud de personas que de forma penosa y humillante han pasado antes por el sistema nacional de salud, dándoles resultados "cero" en sus problemas.
Sra. ministra: ¿Sabe usted que todos los pacientes que atendemos lo hacen voluntariamente? Que habiendo pagado con sus impuestos el sistema nacional de salud tienen que recurrir a otras terapias científicas para solucionar los problemas que no pueden o no quieren solucionar en "lo oficial". Lo que tendrían que hacer es integrar estas terapias a la sanidad pública para reducir el gasto en medicamentos que sabe usted que no sirven para mucho pues los tienen que ir cambiando cada poco por sus efectos secundarios. La homeopatía en cambio mantiene los mismos medicamentos (remedios) que hace 200 años, ¡los mismos! y eso se debe a su alta efectividad.
Sra. ministra: ¿Sabe usted en verdad lo que es la homeopatía? ¿Sabe usted que en el mundo la utilizan más de 200 millones de personas? ¿Me va a decir usted que no cura cuando lleva más de 200 años demostrando por activa y por pasiva su efectividad?
Sra. ministra: la homeopatía no es un placebo, como sostienen algunos mercenarios pseudoescépticos por ahí, sabe usted (o debería saber) que el efecto placebo no existe en recién nacidos, en pacientes en coma, en animales y mucho menos en plantas, y la homeopatía es efectiva en todos estos casos. Y si fuera un placebo, ¿por qué no la utilizan de la misma manera en el sistema nacional de salud para curar sin hacer daño a las personas que sufren y para reducir el gasto?, porque no es un placebo y hay que saber mucha medicina para poder y saber prescribirla.
Sra. ministra: ¿Sabe usted lo que es el I+D+I?, porque si lo supiera no se limitaría a intentar quitar algo que lleva detrás más investigación, desarrollo e innovación que la homeopatía. Sepa usted, Sra. ministra, que la homeopatía será la medicina del futuro porque es una medicina basada en la vida y en la energía.
Espero, Sra. ministra, que pueda usted entender estas palabras, la homeopatía siempre ha sido el "enemigo" de la medicina dominante ¿y sabe usted por qué?, porque cura, y paciente que se cura paciente que no paga medicamentos, y es este el tema de fondo por el cual la homeopatía molesta y hay que eliminarla: el maldito dinero que dejan de ganar aquellos que viven de la farmaindustria o de los "enfermos crónicos" (por cierto, cada vez más numerosos en nuestro pais, ¿lo sabía?).
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