Marxismo, las raíces de la insensatez
La guerra en España, en julio de 1936, comenzó porque lo que ya era inminente que se avecinaba en nuestro territorio era el comunismo. Eso era lo que se estaba preparándose y fraguándose con las muertes de miles de personas en los años 30:
~Tantos y tantos cristianos, tanta y tanta gente de bien; tantos sacerdotes, religiosos y religiosas, seres humanos honestos.
La guerra no fue contra la ciudadanía corriente; fue contra los ciudadanos que defendían las ideologías marxistas, anarquistas, republicanas que estaban matando y masacrando cruelmente a los que no pensaban como ellos.
Franco no luchó contra la democracia, ni contra los demócratas, luchó contra los enemigos de la patria, contra los enemigos de los cristianos y de la gente pacífica.
En aquellos entonces, años 30, la izquierda, la anarquía, la República, unidos estaban traicionando a España y apoyando en esto al comunismo, que pretendía hacer de este territorio lo que después hizo con países como:
~Checoslovaquia, Hungría, Rumania, Yugoslavia, Albania, Polonia,... una parte de Alemania y la misma Rusia.
La élite comunista de Europa y todo aquel que se le unía eran los auténticos enemigos de Franco.
Para tener memoria histórica lo primero que hay que tener es:
~Conocimiento histórico, cultura, buenas intenciones, rectitud, amor a la libertad y respeto.
Hoy, los generadores de la Memoria Histórica son resentidos de unas vivencias que ellos mismos ocasionaron por su maldad o por la maldad de terceros que se aprovecharon o se quisieron aprovechar de ellos.
La memoria histórica de hoy tiene las mismas raíces del comunismo de entonces. Comunismo que por nefasto y sin sentido, solo en 70 años, ya está enterrado y bien enterrado en Europa. Eso sí con 100 millones de muertos en su haber solo en Europa y Asia.
El comunismo hoy, -en países civilizados- solo queda en las mentes de cuatro aprovechados de poca categoría intelectual que tienen que remover en la basura para encontrar las raíces de su propia insensatez, o encontrar cuatro sucias monedas para seguir viviendo:
~¡El fango tiene su atractivo para algunos! ¿O no?
La defensa de la verdad por otro lado exige saber, aprender, pensar, conocer; y no dejarse llevar por los populismos baratos, ni por los radicalismos; ni por líderes sin carisma, ni principios.
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